Que la ciencia ficción y las películas de James Bond tiemblen, porque la idea de las gafas de alta tecnología comienza a materializarse. Aunque las gafas Zeal Trascend han sido desarrolladas para brindar una mayor utilidad a esquiadores y alpinistas, esto no quita la posibilidad de que aparezcan modelos más convencionales en el futuro. Después de todo, un GPS integrado a unas gafas no suena tan mal dentro de una ciudad congestionada…
Visto desde lejos, un esquiador puede transmitir la sensación de que sabe exactamente lo que está haciendo, y que tiene la total seguridad de saber hacia dónde se dirige, pero dentro de la cabeza del esquiador pueden estar pasando muchas otras cosas. Tal vez está bajando demasiado rápido, la inclinación sea muy pronunciada, o lo que es peor, no tiene ni la menor idea de dónde se encuentra. Esquiadores, alpinistas y montañistas perdidos aparecen en las noticias con más frecuencia de la que parece razonable, con toda la tecnología de rastreo y comunicación que existe en estos días. Tal vez no salve vidas directamente, pero algo como unas gafas Zeal Transcend es capaz de brindar una asistencia mucho más amplia de la que se esperaría de este tipo de equipo.
Las gafas poseen un visor LCD incorporado, capaz de reportar en tiempo real diferentes factores como velocidad y altitud, además de contar con un odómetro vertical. Su sistema GPS está integrado a nada menos que Google Maps, posee un puerto USB para descargar la información recolectada, y su batería posee una autonomía estimada de siete horas. La lente, además de estar polarizada, puede realizar transiciones de acuerdo al nivel de luz disponible. Las gafas Zeal Transcend son compatibles tanto con PC como con Mac, por lo que no debería haber mayores problemas al mantenerlas sincronizadas con una portátil a través del puerto USB.
La versión estándar de las gafas Zeal Transcend, que sólo vienen polarizadas, cuesta 399€, mientras que la edición completa se vende a 499€. Aunque no es algo que parezca demasiado útil para el fanático urbano de los gadgets, cualquiera esté rodeado de nieve en forma frecuente debería echarle un vistazo. Al mismo tiempo, estas gafas abren la posibilidad para un diseño un poco más convencional. Hoy recurrimos al GPS a través de dispositivos como tablets y teléfonos móviles. ¿Por qué no buscar la forma de integrarlo, por ejemplo, a un par de gafas de sol? Siempre y cuando el costo sea razonable, llamaría la atención a más de uno.