Otra batería que queda sin carga, otro insulto arrojado al aire. Los dispositivos móviles pueden haber incrementado sus prestaciones de forma notable, al igual que la capacidad de sus baterías, pero siempre existirá una ocasión en la que una batería agotada dará complicaciones al usuario. Móviles y ordenadores portátiles se exponen a energía solar y otras fuentes, sin aprovechar a ninguna de ellas para restaurar la carga de sus baterías. Sin embargo, la empresa francesa Mysips tiene una propuesta muy interesante: Una película fotovoltaica que se instala sobre las pantallas, funcionando como una mini-celda de energía solar.
Veamos: El iPad 2 tiene una autonomía de unas diez horas. El iPhone 4 puede llegar a ese mismo nivel navegando a través de Wi-Fi. El Nexus S ofrece casi siete horas de voz en 3G. Algunas netbooks de Samsung han logrado alcanzar once horas. ¿Acaso no es suficiente? La respuesta es un rotundo no. Quedarse sin batería es cada vez más común, y afecta a smartphones, tablets, móviles básicos y todo tipo de ordenadores portátiles. Un usuario puede administrar minuciosamente la energía de su dispositivo, pero tarde o temprano, la parada en “boxes” se vuelve inevitable. Lo más irónico es que un usuario se ve expuesto a diferentes formas de energía, sin mencionar que el usuario mismo genera energía al desplazarse. Todo eso se ve desperdiciado, cuando nuestros dispositivos bien podrían hacer provecho de esas fuentes, y mantenerse cargados.
Sin embargo, una empresa de origen francés ha desarrollado algo que bien podría cambiar esta situación. La gente de Wysips ha presentado una película compuesta por lentes y delgadas celdas fotovoltaicas en forma de hilos. El diseño está inspirado en las lentes lenticulares, capaces de mostrar imágenes diferentes dependiendo del ángulo en que se las vea. La película se coloca sobre la pantalla del dispositivo, y mientras que el usuario observa el contenido sin obstrucciones, al mismo tiempo las celdas obtienen energía solar, y también aquella que pueda proveer la luz ambiental. De acuerdo a Wyspis, un móvil promedio podría alcanzar una carga completa de su batería en seis horas bajo energía solar, con una alimentación de 250 milivatios.
La película es completamente compatible con dispositivos de pantalla táctil (el espesor es menor a cien micrómetros) y con pantallas que ofrecen efecto autoestereoscópico. La demostración fue realizada en el CTIA Wireless 2011, y se espera que esté disponible de forma general dentro de un año. Lo más importante de esta película es su costo. Según sus desarrolladores, apenas agregaría un dólar en el costo del dispositivo, por lo cual podríamos estar frente a toda una nueva generación de dispositivos que no dependen de cargadores convencionales. El prototipo está un poco verde, y está claro que tiene algún efecto sobre la calidad de la imagen, pero eso es algo que puede ser corregido con procesos más refinados de desarrollo y fabricación. Será cuestión de ver qué empresa decide adoptar primero a esta película.