Así de sencillo. Sin exagerar ni llamar a conferencias de prensa. El gigante de Redmond ha confirmado durante el día de ayer que el lanzamiento oficial de Windows 8.1 será el próximo viernes 18 de octubre a las 00:00, hora local de Nueva Zelanda. Microsoft también nos recuerda que estará disponible como update para Windows 8, en versión retail, y preinstalado en sistemas nuevos.
Tras nueve meses en el mercado, mi experiencia con Windows 8 puede ser clasificada como un ejercicio de desobediencia. Intenté al menos media docena de veces asimilar la visión de Microsoft, pero siempre llegué a la misma posición: No quiero negociar con un sistema operativo. En mi caso, el atajo fue Classic Shell, pero sé que muchos ousuarios han explorado otras alternativas para disfrutar de lo que innegablemente es un sistema operativo estable y compatible. Con Windows 8.1, el panorama es diferente. Estoy convencido de que será necesario modificar mi postura una vez más, y explorar no sólo lo que trae Microsoft a la mesa, sino también cómo lo trae.
La beta pública de Windows 8.1 ha estado en circulación desde junio pasado, pero la versión final ya tiene fecha de lanzamiento: 18 de octubre. Si obedecemos al anuncio de Microsoft, el debut será global, comenzando a la hora cero en territorio neozelandés. Aquellos que sean parte del 6,6 por ciento que tiene Windows 8 instalado en sus sistemas recibirán la actualización en forma gratuita a través de la tienda de Windows, pero también habrá ediciones retail, y como era de esperarse, licencias preinstaladas en tablets y ordenadores nuevos.
Este reciente anuncio de Microsoft está acompañado por ciertos ajustes en otros productos, principalmente la consola Xbox One, que ha dejado de lado el requerimiento del sensor Kinect, y que será demorada hasta 2014 en ocho países europeos (España se mantiene en la lista de lanzamiento para noviembre). No ha sido un 2013 fácil para Redmond, y diciembre aún está bastante lejos en el calendario. El que Windows 8 necesite una actualización mayor en menos de un año no es un detalle fácil de digerir, pero no hay dudas de que están tratando de corregir las cosas. Estaremos esperando.
