En un nuevo episodio de «Esto va a terminar mal y todos lo sabemos», algunos usuarios han comenzado a experimentar con las últimas imágenes ISO disponibles de Windows 11 en equipos sin soporte oficial. Una de las novedades más interesantes llega a través de The Verge, donde detectaron una advertencia que esencialmente confirma un secreto a voces: Microsoft no planea ofrecer updates para esos sistemas.
La idea de que Microsoft hace todo esto para que el público salga a comprar nuevos equipos (y nuevas licencias asociadas con ellos) ha hecho mucho ruido en la Web, pero si hay algo que debemos admitir es lo siguiente: La demanda de nuevo hardware ya existe sin Windows 11. Los GPUs se esfumaron en el aire, y los pocos que hay tienen precios estratosféricos. El backlog de las fábricas se extiende por meses, afectando incluso a industrias como la automotriz. Y la próxima generación de plataformas costará una fortuna, si nos guiamos por las primeras filtraciones.
Difícil de creer, pero real. A pesar de la situación actual, hay gente tratando de actualizar sus PCs, no por priorizar a Windows 11 (seamos honestos, la gran mayoría de los usuarios ni siquiera sabe qué Windows tiene), sino para acceder a un mayor rendimiento y los últimos servicios. La discusión gira alrededor de aquellos usuarios que no desean o no pueden reemplazar sus ordenadores, y del famoso «1 por ciento de usuarios hardcore» que planea modificar hasta el alma del sistema operativo. Microsoft hará todo a su alcance para que Windows 11 no se instale en equipos incompatibles… pero sabe bien que la gente lo intentará de todos modos. Y de ahí surge su «compromiso»: Instalación manual, sin soporte ni updates.
La nueva advertencia de Windows 11
La imagen fue publicada originalmente por The Verge. Al momento de instalar Windows 11 en un equipo sin soporte oficial, Sean Hollister recibió un pequeño mensaje solicitando su atención. El lenguaje es directo: El equipo no reúne los requisitos mínimos, no se recomienda instalar Windows 11, podrían surgir problemas de compatibilidad, si el usuario continúa de todos modos el ordenador no tendrá soporte, y no recibirá updates. También agrega que los daños potenciales asociados a la falta de compatibilidad no son cubiertos por los fabricantes (clásico «el software no tiene garantía»).
Al pedir información adicional a Microsoft, Hollister no recibió respuesta. En paralelo, la gente de Ars Technica trató de reproducir el mensaje, pero sólo recibió el bloqueo previo que puede ser rodeado con algunos hacks en el Registro. Lo único que podemos hacer es esperar. Microsoft aún tiene que explicar varios detalles sobre esa negativa a ofrecer updates, comenzando su alcance real. ¿Hablamos de hotfixes de seguridad? ¿Definiciones de Windows Defender? ¿Controladores de hardware? ¿Todo? Muchas dudas, pocas respuestas.
Fuente: The Verge
Me sonó a… “les vamos a mandar pantallas azules a cada ratos hasta que hagan caso de comprar mejores equipos….”