Desde el comienzo, la utilización de la red BitTorrent ha sido como mínimo controversial. Piratería, sobrecarga de ancho de banda, problemas para los proveedores de Internet… prácticamente se la acusa de todo lo que acontece en la red. Ahora, la gente de uTorrent está desarrollando un nuevo protocolo llamado uTP, que en resumen apunta a traspasar las transferencias P2P de uTorrent del protocolo TCP al protocolo UDP. Hoy veremos dónde comenzó el caos, qué es el UDP, y algunas pruebas con la versión alfa disponible.
¿Explota o no explota?
Apenas se supo que uTorrent tendría como protocolo por defecto a su nuevo uTP en su última versión alfa, un artículo publicado en The Register y escrito por Richard Bennett afirma que "BitTorrent le ha declarado la guerra a VoIP y a los jugadores", en donde el nuevo protocolo podría afectar todas las comunicaciones VoIP, la actividad de juegos en línea, y de paso hacer volar a la red por los aires. Defensores y detractores del artículo ya han tomado cartas en el asunto, por un lado, demostrando preocupación por los posibles inconvenientes que provocaría este cambio de protocolo, y por el otro, acusando a Bennett de generar lo que los norteamericanos llaman FUD (siglas para Miedo, Incertidumbre y Duda).
A nivel técnico, uTP trabaja sobre el protocolo UDP para transferencias de punto a punto. ¿Por qué preocupa tanto esto? El protocolo TCP posee un sistema de control de congestión integrado, el cual impide que la red se "atore" y los paquetes se mantengan fluidos, lleguen a destino, y lo hagan tal y como fueron enviados originalmente. En comparación, UDP es un poco más caótico. Es un protocolo con una muy baja tolerancia a demoras, lo que hace que no tenga ninguna clase de control de congestión o de corrección de errores. Los paquetes llegan en diferente orden, algunos llegan duplicados y otros directamente se pierden, pero en situaciones como Voz sobre IP o los juegos en línea, la latencia lo es todo. Ahora, según Bennett la mitad del tráfico existente en Internet hoy en día corresponde a transferencias P2P. Si todo ese tráfico se trasladara a un protocolo que no tiene ninguna capacidad de control de flujo, entonces toda la red se vería afectada, al menos en teoría. La respuesta posible de los proveedores sería aplicar alguna clase de filtro en el protocolo UDP, pero filtrar algo que depende exclusivamente del tiempo que tarda en llegar, lo arruina por completo.
Un alto ejecutivo de BitTorrent Inc. (empresa dueña de uTorrent), además de descalificar por completo el artículo de Bennett, explica que el paso de uTorrent al protocolo UDP es para lograr el efecto opuesto al que declara Bennett: Aliviar la carga de la red, ya que el tráfico actual del protocolo UDP en Internet es menor al 2%. Con uTP planean implementar su propio control de congestión midiendo latencias, y detectando los puntos en donde la red no puede cumplir con la demanda. Ante esos puntos, uTorrent iría más lento, esperando a que las cosas se vuelvan un poco más fluidas. En resumen, uTP haría las transferencias BitTorrent más livianas para la red, más eficientes y menos agresivas.
Ahora, ¿cómo afecta todo esto al usuario actual de uTorrent? No mucho, al menos por ahora. La implementación del protocolo uTP está en fase alfa, con todas las consecuencias que eso puede llegar a traer (cuelgues, descargas más lentas, etc.). En el mismo foro de uTorrent se ha colocado en letra gigantesca que la versión alfa no es recomendada para uso diario, por lo que el usuario promedio debería esperar hasta la versión 1.9 final de uTorrent para ver cómo funciona el nuevo cambio de protocolo. Sin embargo, nosotros descargamos la versión alfa, la instalamos y decidimos bajar algo.
El "algo", como siempre, fue un torrent estable y con una buena velocidad de descarga: Una distro de Linux. En esta ocasión nos inclinamos por la última versión de Ubuntu. Al descargar el torrent de la página oficial, uTorrent respondió como siempre lo ha hecho, iniciando la descarga sin inconvenientes. En la sección Peers pudimos ver que varias de las conexiones tenían a un lado la leyenda "uTP". Eso indica que dichas conexiones se estaban realizando a través del nuevo protocolo. Para utilizar uTP, ambas partes deben estar preparadas para hacerlo, por lo que sólo podrás realizar conexiones uTP desde peers que posean la versión 1.8.1 de uTorrent, o la versión alfa 1.9.
En cuanto a velocidad, no notamos un impacto significativo ya sea en forma negativa o positiva. La descarga flotó alrededor de los 180 Kb por segundo, utilizando la misma conexión que cuando hablamos sobre los aceleradores P2P. Sobre problemas de estabilidad, nosotros no sufrimos ninguno, pero el foro de uTorrent se ha ido poblando lentamente con reportes de cuelgues y problemas bajo ciertas configuraciones. Por lo tanto, dejaremos el enlace al final del artículo, pero no digas que no te avisamos. La alternativa es intentar activar uTP en la versión 1.8.1 de uTorrent. Está allí, sólo que viene deshabilitada por defecto. Si quieres experimentar un rato, sólo debes ir a la sección Advanced en la configuración de uTorrent. Allí busca el parámetro bt.transp_disposition y cambia su valor de 0 a 255. Recuera cerrar y abrir uTorrent para que tome los cambios.
El impacto de este cambio de protocolo se podrá ver realmente cuando la versión final de uTorrent salga a la red. Este cliente es uno de los más utilizados entre los que realizan descargas P2P, pero eso no es todo. Se ha anunciado que eventualmente el protocolo uTP se abrirá, lo que haría que estuviera disponible para otros clientes como Vuze o BitComet, o para cualquiera que lo desee implementar. Una cosa es cierta: El tráfico UDP no puede ni debe filtrarse. Toda aplicación que utilice este protocolo se verá afectada negativamente si un proveedor decide ponerle un tapón a las transferencias UDP sólo para aplicar cierto control al tráfico BitTorrent. De todas formas, la palabra final la tendrán los usuarios. Si uTP resulta ser más lento que el método actual de transferencia, los usuarios simplemente lo desactivarán y seguirán transfiriendo a través de TCP como hasta ahora.
¡Buena suerte!