Ariel Palazzesi
El ejército no escatima en gastos. Además, utiliza todas las tecnologías a su alcance para mejorar su “eficiencia”. Hoy te mostramos el proyecto “Mules”, que proporcionara ambulancias voladoras autónomas para ser utilizadas en las zonas de guerra.
Si hay un ámbito propicio para probar nuevas tecnologías, ese es el militar. Sus elevados presupuestos permiten llevar a cabo investigaciones que las empresas de otros sectores nunca podrán siquiera intentar.
Últimamente estamos viendo varios desarrollos de vehículos voladores que parecen copiados de alguna película de ciencia ficción. La ambulancia que te mostramos hoy, que ha recibido en nombre de Mules, esta concebida como un vehículo aéreo de despegue y aterrizaje vertical, capaz de operar en sitios pequeños. Hasta aquí podríamos estar hablando de un helicóptero convencional, pero lo que hace especial a este vehículo es que no necesita un piloto a bordo: es completamente autónomo.
Sin necesidad de poner en riesgo la vida de un medico o piloto, Mules puede volar hasta el lugar donde un soldado está esperando socorro, y traerlo de vuelta a una zona segura, volando a 160 kilómetros por hora.
El diseño se basa en una serie de turbinas que impulsan el vehículo hacia arriba, y se basa en un proyecto que nunca vio la luz. Ese proyecto intentaba poner a disposición del ejército de los Estados unidos un “jeep volador”, allá por los años 50. Ahora, con todos los avances tecnológicos puestos a su servicio, la idea parece funcionar.
El costo de cada una de estas ambulancias futuristas se estima en 1.5 millones de dólares, algo bastante razonable para los militares. La idea de los desarrolladores es ponerla en funcionamiento antes del 2010.
