El iMac G4 es uno de los ordenadores más interesantes de la familia Apple, pero con dos décadas sobre los hombros, se vuelve difícil encontrar ejemplares que funcionen a la perfección. Si a eso le sumamos su configuración obsoleta de hardware, el G4 adquiere un mejor perfil al momento de realizar proyectos especiales. Con eso en mente llegamos al canal de Hugh Jeffreys en YouTube, quien logró rescatar a tres equipos G4 en un estado lamentable, y revivir a uno de ellos usando el silicio actualizado de Apple…
La historia nos dice que el iMac G4 llegó a las tiendas de Apple en enero de 2002. Además de convertirse en el primer iMac que adoptó por completo a la tecnología LCD para sus paneles, el diseño híbrido entre «girasol y lámpara» automáticamente capturó la atención del público. Aún así, el G4 estuvo disponible por menos de tres años: Los usuarios demandaban pantallas aún más grandes, y las exigencias térmicas del nuevo silicio obligaron a Apple a utilizar un diseño conservador en el G5.
Fast forward de 22 años, el iMac G4 es un modelo esencial para cualquier coleccionista y entusiasta del hardware, pero lo más probable es que arrastre algunos «dolores». De hecho, Hugh Jeffreys (a quien conocemos por sus fabulosas reparaciones de smartphones) logró encontrar tres localmente, abandonados en la calle para que cualquier interesado se los llevara. En un estado calamitoso y con su hardware original sin funcionar, Hugh tomó el mejor camino: Instalar un ordenador nuevo en su interior.
iMac G4: Transformado de PowerPC a M1, 22 años después
Hugh decidió comenzar por la pantalla y el brazo mecánico. La buena noticia es que el panel 1080p de una portátil Macbook Pro encaja a la perfección dentro de la carcasa, y en AliExpress es posible comprar todo el hardware necesario para que funcione correctamente. La mala es que el proceso de «enhebrar» los nuevos cables y desarmar/armar el brazo mecánico es una verdadera pesadilla. Desde el principio queda claro que el brazo recibió algunos golpes con el paso del tiempo, afectando su alineación. Hugh debió buscar la ayuda de su padre para volver a ensamblarlo, con una buena dosis de fuerza bruta.
De más está decirlo, la carcasa era un festival de suciedad, pero una sólida combinación de agua, detergente y pasta dental hicieron maravillas en el plástico. El hardware escogido para transformar a este iMac G4 es un Mac Mini con el chip M1. Si bien no se trata del ejemplar más veloz en dicha serie, es un excelente candidato por su perfil reducido, y su bajo consumo de energía. Hugh debió construir un botón de encendido, adaptar las antenas WiFi existentes y usar una cantidad importante de pegamento en varios puntos, pero el resultado final es genial, y este iMac G4 puede volver a brillar en 2024.
Bonito diseño, lastima que el monitor no es más grande