Tanto BitTorrent como el intercambio de archivos en general siguen tan vivos como siempre, pero sus constantes roces con la ley también permanecen activos. Los sistemas legales alrededor del globo están haciendo las cosas cada vez más difíciles para los trackers, pero una versión internacional del famoso Partido Pirata está considerando una solución un poco más definitiva. A simple vista, la respuesta es sencilla: Colocar un servidor BitTorrent en un lugar en donde la ley no llegue. ¿Y en qué lugar han pensado? Nada menos que el espacio exterior.
Turistas, satélites que envían tweets, y ahora, servidores BitTorrent. La idea parece descabellada, ya que no es particularmente barato colocar, digamos, "cualquier cosa" en órbita, pero la concentración de opiniones y la búsqueda de una solución definitiva a la constante presión que los trackers y los sitios relacionados con el protocolo de intercambio sufren por parte de los actuales sistemas legales, bien permiten considerar esta posibilidad. El punto es, de una forma u otra, evadir toda jurisdicción para impedir que la orden de un juez o el reclamo de ciertas organizaciones pueda quitar de la Web a un sitio dedicado a ofrecer torrents. The Pirate Bay intentó hacer algo parecido en enero de 2007 cuando trató de comprar a la micronación de Sealand, pero la operación nunca se materializó. Este intento quedó en la mente de muchos, pero también se ha explorado una idea un poco más radical: Colocar un servidor BitTorrent en el espacio.
En la lista de correo del Pirate Parties International, conocido como una organización que une a varios de los "Partidos Piratas" existentes alrededor del mundo, lo que podría haber sido tomado como una broma tomó un matiz bastante más serio. Todo comenzó con la idea de crear un globo que opere a una altitud extrema, y que tenga instalado en su interior un servidor BitTorrent. Se habló de globos para el clima, paneles solares, y hardware "de código abierto". Pero mantener en el aire a ese globo podría ser bastante complicado, por lo tanto, comenzó a barajarse la idea de un satélite en órbita, algo mucho más difícil de lograr pero con una durabilidad superior. También han surgido propuestas para un bote en aguas internacionales. Algo así sería mucho más razonable de lograr, y menos costoso.
Sin embargo, todo se reduce a cuatro factores: Conectividad, dominio, número de IP y mantenimiento: El hardware no es eterno, y una reparación puede ser necesaria en cualquier momento. Al mismo tiempo, por más que el servidor esté en el mar, el aire o el espacio, "alguien" debe conectarlo a la Web, y ese alguien son los proveedores que simplemente pueden recibir una orden judicial para interrumpir su conexión. Le ha pasado varias veces a The Pirate Bay, y siempre ha regresado de una forma u otra, pero los detalles detrás de este proyecto son demasiados, y requerirá tanto de tiempo como de dinero para llevarlo a cabo. De todas formas, sería muy interesante que lo logren. Aquellos que dicen ser "agraviados" por esta clase de sitios han llevado adelante prácticas nefastas que han hecho un daño considerable, ganando así la ira y el rechazo de los usuarios. No estaría nada mal que la balanza encuentre al menos un poco de equilibrio.