Icefin es un vehículo robótico, similar a un submarino no tripulado, que fue desplegado en lo profundo de la Antártida. Las lecturas tomadas muestran cómo las condiciones climáticas afectan al hielo y los diferentes organismos que habitan en la profundidad del océano.
Un equipo de científicos e ingenieros del Instituto de Tecnología de Georgia montaron un vehículo robótico, similar a un submarino no tripulado, en la Antártida. El vehículo llamado Icefin fue desplegado a través de un agujero de doce pulgadas de diámetro a través de veinte metros de hielo y otros quinientos metros de agua en el fondo del mar. El objetivo de Icefin es medir las condiciones del océano bajo el hielo. Las lecturas tomadas bajo las plataformas de hielo de la Antártida, junto al vídeo que se desarrolla en estas duras condiciones, ayudaron a entender cómo el hielo está cambiando en condiciones de calentamiento, y cómo los organismos se desarrollan en ambientes fríos y oscuros.
Los biólogos quedaron asombrados al ver la cantidad de vida en ese lugar que incluía estrellas de mar, esponjas y anémonas que estaban en el fondo del océano. Vale remarcar que el océano Antártico puede ser tan profundo como cinco mil metros. Icefin es capaz de bucear a mil quinientos metros y puede realizar investigaciones de tres kilómetros de largo. Los vehículos anteriores de esta misma clase se calificaron a unos pocos cientos de metros. Las tecnologías desarrolladas para Icefin también ayudarán en la búsqueda de vida en otros planetas, como por ejemplo, Europa, la luna de Júpiter. El océano helado de la Antártida es notablemente similar al océano que hay en dicho satélite.
Britney Schmidt, profesor en la Escuela de Ciencias de la Tierra y el investigador principal para el proyecto Icefin, está satisfecho con la comprensión del sistema oceánico realizado en la Antártida, ya que le permiten progresar en las hipótesis necesarias para investigar Europa. El proyecto fue financiado por la NASA y contó con el apoyo de la NSF (National Science Foundation), junto con Schmidt como el investigador principal. Por lo pronto ya se tiene previsto que Icefin tenga su debut en el océano Ártico a mediados de 2016, con una vuelta a la Antártida a fines del mismo año
