El investigador Sylvain Calinon ha construido un robot capaz de realizar un retrato de la persona que tiene delante, utilizando para ello su mano y una pluma de ave. El robot incluso se encarga de empapar periódicamente la pluma con tinta, tal como lo haría un artista humano. Y lo que es mejor, los dibujos se parecen bastante al modelo.
Aunque posiblemente no tenga mucha utilidad más allá del ámbito académico, se trata de un desarrollo sumamente interesante para los investigadores en temas de robótica. Es decir, probablemente nunca será práctico reemplazar la labor de una cámara fotográfica y una impresora con un robot dibujante, ya que solo significaría complicar las cosas. Pero el trabajo del investigador Sylvain Calinon, del Learning Algorithms and Systems Laboratory, seguramente servirá como base para otras aplicaciones que si resultan útiles, como la construcción de retratos robot de sospechosos o el reconocimiento de formas y figuras en espacios 3D.
Básicamente, lo que hace el robot creado por Sylvain es registrar la imagen del rostro de la persona que tiene enfrente y separarla del fondo. Esto implica el uso de algoritmos de reconocimiento de patrones y ajustes para compensar las diferencias de iluminación o en la posición del modelo. Luego, el software del robot transforma la fotografía en una imagen vectorial. Este paso no es demasiado novedoso, y prácticamente cualquier software de ilustración dispone de opciones similares.
Una vez que el robot tiene lista la imagen del modelo, procede a dibujarla. En lugar de utilizar una impresora para esta etapa del proceso, Sylvain ha dotado a su robot de una mano con la que, gracias a sus cuatro grados de libertad, puede coger una pluma (¡si, una pluma de ave!) y dibujar directamente la imagen sobre un papel, tal como lo haría un plotter. El siguiente video muestra al robot en acción.