Según un reciente informe sobre las preocupaciones relacionadas con Internet y los hábitos de los compradores de España, Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia y Reino Unido. Un 19% de los usuarios de redes sociales en España afirma tener sus contraseñas bancarias disponibles entre la información que comparte con otros usuarios de estas redes.
Y es que, según el estudio de Ipsos, realizado por encargo de PayPal, la empresa de pagos por Internet, casi la mitad de los que compran por la red utiliza como contraseña su fecha de nacimiento u otra fecha destacada. En el caso de España es un 21% de los usuarios.
Asimismo, un 15% de los españoles encuestados elige como contraseña el nombre de su mascota y el 14% el de un familiar. Además, el 63% de los españoles cambia sus contraseñas menos de una vez al año, o sólo cuando se lo requieren.
Esta disposición a no ocultar este tipo de información privada en las redes sociales se corresponde con la de la mayoría de los usuarios de Europa continental, más proclives que los anglosajones a compartir su fecha de cumpleaños, número de teléfono o domicilio.
Fraude online
De este estudio, se desprende también que los españoles están principalmente preocupados por el fraude online (83%), pero también por aspectos relacionados con el comercio electrónico en general, como el hecho de que el producto comprado no sea como el de la foto (84%), que la calidad del producto no sea la anunciada (83%) o que el pedido no llegue nunca (82%).
Sólo la mitad de los usuarios de comercio electrónico en España hacen uso también de la banca electrónica. De estos, el 50% tienen una cuenta PayPal, mientras que el 27% utiliza ambas. España ha sido el último país de los analizados en incorporarse al comercio electrónico, ya que tres de cada cuatro internautas ha empezado a comprar en Internet hace menos de 5 años y sólo el 9% lo hace de manera semanal o más a menudo.
Un interesante estudio que, más allá del comportamiento de los usuarios en España, nos deja una enseñanza vital: Elige contraseñas disasociadas de tu persona, que no contengan datos sensibles. Al menos si quieres estar lo más seguro posible, en una red que cada día guarda más y más información personal (y financiera).
