Hay muchos clientes compatibles con la red BitTorrent, y cada uno de ellos posee sus fortalezas y sus debilidades. Normalmente, lo que un usuario espera de un cliente es velocidad, pero al mismo tiempo los desarrolladores están explorando alternativas. El concepto de "streaming por P2P" no es nuevo, sin embargo aún no ha adquirido el volumen de uso que muchos esperaban. La nueva versión de Tribler intenta diferenciarse de la competencia ya que, además de ser un cliente BitTorrent, ofrece streaming P2P de aquello que estamos descargando.
La descarga de Tribler fue mucho más grande de lo que estamos acostumbrados a ver en un cliente BitTorrent. Ejemplos como uTorrent poseen un tamaño muy pequeño, pero el instalador de Tribler demandó más de 22 MB de espacio. Es probable que el espacio adicional que necesita Tribler se deba a algún grupo de codecs integrados necesarios para la reproducción. En cuanto a la instalación no tuvimos mayores problemas, pero debimos abrir un puerto TCP para el programa en el firewall y en el router.
Lo primero que nos sorprendió de este cliente apenas lo ejecutamos fue su simpleza. Tiene disponibles muy pocos comandos, y la sección de configuración es todavía más austera. De hecho, hay varias funciones críticas que están ausentes, como la encriptación. El hecho de realizar streaming (o una transferencia normal) a través de p2p sin ninguna clase de encriptación hace que estemos completamente desnudos en la red. Otras funciones ausentes son soporte para uPnP y parámetros adicionales para configuraciones NAT. Lo único que podemos cambiar es el número de puerto, para lo cual es necesario reiniciar a Tribler.
Tribler plantea que con su motor de búsqueda interno podría dejar obsoletos a sitios como Mininova. Sin embargo, esta versión de Tribler no puede detectar enlaces rotos o falsos, por lo que podemos terminar con un torrent que sea pura basura. Es probable que en el futuro esto sea corregido, pero hasta entonces, cuando busques un torrent dentro de Tribler, deberás prestar mucha atención.
En cuanto a la reproducción, lamentablemente deja mucho que desear. Por un lado, tuvimos que esperar diez minutos para recibir los primeros cuarenta segundos de vídeo antes de que el búfer reclamara más información. Y por el otro, no hay ninguna clase de control de vídeo en el modo de pantalla completa. Para ajustar el volumen hay que regresar a la pantalla anterio, y ni hablemos de cosas básicas en cualquier reproductor como controles de contraste y brillo.
Es verdad que no podemos olvidar que se trata de una versión de prueba, pero también es verdad que si Tribler quiere convertirse en un cliente BitTorrent diferente, deberá recorrer un muy largo camino. Como cliente es bastante mediocre, y en la única función que intenta destacarse, no lo consigue. También hay que echarle un poco la culpa al streaming P2P. Cada vez queda más en claro que este tipo de transmisión requiere de una conexión de banda ancha más rápida que el promedio. Es probable que con una conexión de tres megabits por segundo sea suficiente para mantener el búfer cargado, pero el torrent también carga con una gran responsabilidad, dependiendo de la cantidad de seeds.
En resumen, esta versión de Tribler aún no está lista para el público. Fue simplificado en exceso, le faltan funciones internas básicas, y el rendimiento del streaming no es nada bueno. Por ahora, sigue siendo mucho más eficiente descargar los vídeos como siempre, y reproducirlos directamente desde el disco duro. Hay que esperar más, pero al menos no hay que lidiar con búferes débiles ni pausas repentinas.