Participó en el Festival de Cannes, y el lugar terminó en llamas. De un lado, creen que es la Apocalypse Now de este siglo, dando inicio a una nueva era para el cine. Del otro, están quienes la interpretan como un delirio, un despropósito sin sentido, producto de una visión obsoleta. Acusaciones de conflictos en el set de filmación, comportamientos inapropiados, y consumo de sustancias. 120 millones de dólares, salidos del propio bolsillo de Coppola. Un casting increíble, en todos los niveles. La promesa de un estreno en IMAX este año, cuando ni siquiera tiene distribuidor. Y en el medio, nosotros. ¿Megalopolis pasará a la historia, o se perderá en el tiempo? Sólo hay una forma de averiguarlo…