Un equipo de científicos está trabajando en la creación de un modelo informático que emula buena parte del cerebro de una abeja melífera. La abeja europea (Apis mellifera), también conocida como abeja doméstica o abeja melífera, es la especie de abeja con mayor distribución en el mundo. Este equipo, conformado por especialistas de las Universidades de Sheffield y Sussex espera poner a punto una suerte de “cerebro de abeja robótico”, capaz de reproducir a la perfección los sistemas que gobiernan la visión y el sentido del olfato de estos insectos y utilizarlo para comandar lo que sería el primer robot volador autónomo con la capacidad de comportarse autonomamente como una abeja. El trabajo ya ha comenzado, y si tienen éxito estarán cumpliendo uno de los más grandes retos de la ciencia actual: construir un cerebro robótico capaz de realizar tareas complejas. En general, los trabajos de este tipo se han enfocado en la emulación de cerebros de mamíferos. Pero los insectos también poseen cerebros “potentes”, incluyendo una gran capacidad para discriminar olores o la presencia de sustancias químicas.
Según James Marshall, un científico de computación de la Universidad de Sheffield que forma parte de este equipo de trabajo, “la simulación de un cerebro es uno de los grandes retos de la inteligencia artificial. Hasta ahora, muchos de los intentos de recrear cerebros biológicos se han centrado en los sistemas cognitivos que se encuentran en los seres humanos, monos o ratones. Hemos dejado de lado hasta ahora a los organismos más simples como los insectos, a pesar que tienen capacidades cognitivas sorprendentemente avanzadas.” Los científicos esperan utilizar estos robots voladores en misiones de búsqueda y rescate, o incluso, la polinización mecánica de algunos cultivos. Este proyecto también servirá para comprender mejor como funciona el cerebro de la Apis mellifera.