Lisandro Pardo
La historia comienza así: En febrero pasado, Amazon confirmó el lanzamiento de una nueva versión de Alexa (llamada Alexa+) para usuarios de Prime en los Estados Unidos, y para quienes paguen 20 dólares mensuales. ¿Cuál es el problema? Según la compañía, esto requiere el uso de funciones generativas, que sólo pueden ser procesadas online. Por lo tanto, Amazon decidió que a partir del 28 de marzo, la transformación local de audio a texto para Alexa en los dispositivos Echo ya no estará disponible.
Philip K. Dick preguntó en su momento si los androides sueñan con ovejas eléctricas. En estos días, parece más apropiado preguntar si los CEOs sueñan con «Grandes Hermanos» reales. A juzgar por la masiva recolección de datos, no es complicado imaginar que la respuesta es «sí», pero si alguien necesita una prueba adicional, todo lo que debe hacer es leer el último anuncio de Amazon destinado a sus usuarios de Echo en los Estados Unidos:
Amazon quiere tu voz
El mensaje oficial de Amazon indica que a partir del 28 de marzo, la función «Do Not Send Voice Recordings» en los dispositivos Echo dejará de tener soporte. ¿Qué significa exactamente? Muy simple: Cuando el usuario activa esa función y dice la wake word configurada, un algoritmo integrado se encarga de transcribir la solicitud de audio a texto. Ese texto es cifrado y enviado a la nube de Amazon. Una vez que el procesamiento concluye, el audio original de la solicitud es eliminado. Después del 28, ese tipo de transformación local no será posible.
¿Por qué? El argumento de Amazon es que los recursos de Alexa están siendo expandidos con «funciones generativas de inteligencia artificial» que dependen del poder de fuego disponible en su nube. Al mismo tiempo, quienes no desactiven el procesamiento local, perderán acceso a Voice ID, una función para personalizar acciones (eventos del calendario, preferencias musicales, etc.). Como era de esperarse, la opinión del público en la Web es muy diferente: Amazon quiere las voces de todos los usuarios de Alexa para entrenar a Alexa+.
El anuncio parece estar enfocado en usuarios estadounidenses, pero imagino que la compañía no se tomará mucho tiempo para expandir su nueva «política» al resto del mundo. En resumen, Amazon alteró el trato, recemos para que no lo altere más.
Fuente: Ars Technica
A ver si algún listillo de esos que instalan DOOM hasta en la taza del café consigue abrir un cacharrito de estos y sanearlos, lo mismo desconectando sus micrófonos.