Los videojuegos en el ordenador venden cada vez menos, y para muchos, su futuro está solo en las consolas, dejando a los ordenadores PC para los juegos en línea o de rol. Claro que también hay muchos otros que luchan para evitar el fin, adoptando medidas para sostener el mercado que alguna vez llevó adelante a la industria de los videojuegos
Desde sus comienzos la industria de los ordenadores y la de los videojuegos han estado unidas. A veces de manera casi casual, otras a propósito, lo cierto es que una y otra se han apoyado mutuamente para crecer y consolidarse.
En los comienzos los enormes ordenadores no tenían espacio para juegos, y como mucho se podía encontrar algún que otro juego de palabras. El verdadero furor llegó con las Home Computers en los años 80: con las Commodore 64 o los CZ Spectrum lo mejor que había era llegar del colegio para almorzar apurado y ponerse a jugar.
Los videojuegos eran la esencia misma de los ordenadores, tanto que para muchos los ordenadores no existían para otra cosa que para jugar, y en gran parte en aquellos años esa fue la consigna de la industria.
Como si estuvieran de acuerdo, los fabricantes lanzaban modelos de ordenadores para que los gamers tuvieran más opciones, y los desarrolladores de videojuegos lanzaban títulos todo el tiempo para que el mercado se volviera más interesante. Y ya en aquellos tiempos el futuro de un determinado modelo de ordenadores dependía de los juegos que los usuarios tuvieran a su disposición.
Esa posición de fortaleza que los desarrolladores tenían en aquel momento tuvo sus momentos de altibajos, y hubo épocas en que los fabricantes de ordenadores fueron quienes estuvieron en la posición mandante. Y quien se encontraba del lado de arriba de la rueda no siempre fue benevolente con el que estaba casi hundido.
Hoy, en cambio, están todos unidos en la PG Gaming Alliance: fabricantes y desarrolladores, en pos de lograr que subsista el mercado de los videojuegos en los ordenadores PC, que en el año 2007 ha obtenido solo el 14% del total de las ventas de videojuegos. ¿Cómo se llegó a esta situación límite?
Hay casi tantas explicaciones como empresas involucradas, pero intentaremos ir paso a paso hasta llegar a una que nos satisfaga realmente, y que podamos definir como justa. Entre las principales causas para el desinterés por los juegos de ordenador está el impresionante avance de las consolas.
Pero también esto tiene sus puntos a considerar ya que hubo épocas en las que consolas y ordenadores convivieron en perfecta armonía, cada cual en su mercado, con buenas ganancias para todos. La principal ventaja de las consolas hoy en día es su estandarización, eso permite que quien se compra una consola sepa que sus juegos van a correr sin problemas cuando llegue a su casa. Este parece un dato irrelevante, pero no son pocas las veces que un usuario de PC intenta instalar un videojuego para darse cuenta de que no importa cuanto intente, la cosa no va como hubiese querido.
Es que hay demasiadas especificaciones, cada fabricante produce ordenadores con los componentes que para su presupuesto son los mejores, y hay tantos pero tantos modelos distintos que el usuario medio a veces no sabe que hacer. Esta claro que para los fabricantes de ordenadores esta libertad es fantástica, pero hay veces en que las cosas pueden volverse en su contra, y este es un ejemplo concreto.
En ocasión de dirigirte a comprar un ordenador lees que tiene tarjeta de vídeo de 256 megabytes de RAM, pero al investigar más descubres que se trata de tarjetas no dedicadas, o con memoria compartida con la RAM principal, de modo que “le restan” a esta los megabytes para utilizarlos en aceleración 3D. Muy lindo, pero cuando no estamos jugando tenemos menos memoria para las aplicaciones e internet, memoria desperdiciada esperando la hora de los juegos.
Otras veces los fabricantes o las tiendas ofrecen ordenadores con discos duros de muy buena capacidad…pero que trabajan a bajas RPM, con la consiguiente pérdida de rendimiento para los juegos más extremos.
Y así hay varios ejemplos más, claro que no podemos hablar de mala fe por parte de quien fabrica o vende los ordenadores. Las ofertas son buenas, el problema está en que las cosas están poco claras para el usuario, que muchas veces cree que con la compra de un ordenador se terminan todos sus problemas.
Pero el gadget ideal y definitivo todavía no existe, y hasta tanto eso suceda el ordenador no puede hacerse cargo de todas nuestras necesidades. Esa lucha por la estandarización es uno de los primeros aspectos en los que luchará la PC Gaming Alliance: algunas ideas son las de crear categorías, con especificaciones en cuyos rangos pueda haber variaciones menores que no alteren demasiado su comportamiento, de manera que un ordenador básico o de nivel 1 tendría determinadas prestaciones que los usuarios conocerían de antemano.
Y así en cada categoría, lo que permitiría a los usuarios conocer de antemano las prestaciones (de manera bastante aproximada) de su futuro ordenador. Y con identificaciones en los videojuegos, que permitan saber para que categoría de ordenador han sido diseñados, uno podría estar tranquilo de que los juegos funcionarán.
Claro que los problemas continúan, porque aún habiendo desarrollado estos estándares, luego el rendimiento será cuestión de cada ordenador, de la cantidad de aplicaciones que tenga instaladas y del mantenimiento general que tenga.
Así, ante dos ordenadores iguales, luego no será lo mismo uno que solo se utiliza para jugar y para revisar el correo, que uno donde quien lo utiliza ha instalado Google Earth, todo el paquete de Office, y multitud de aplicaciones más. Aquí entra en escena el sistema operativo, y hay que decir que la cosa tampoco parece alentadora ya que Microsoft (parte de la PC Gaming Alliance) propone a Windows Vista como el sistema operativo para juegos.
En las consolas, en cambio, es cuestión de encenderlas y en segundos estarás jugando. Sin sistema operativo que consuma recursos de manera permanente. Porque el ordenador, más allá de que estés jugando o no, mantiene “por detrás” de tus juegos toda una serie de aplicaciones, procesos, etc, que consumen memoria, sobre todo en un sistema operativo como Windows Vista. Que además, por su naturaleza y la forma en que ha sido desarrollado, es extremadamente susceptible a los ataques de virus.
Ya ves, en las consolas todo es mucho más fácil, al menos para sentarte a jugar. Además, en el mundo de los ordenadores PC se viene dando una situación de manera cada vez más notoria, y es la del avance de las portátiles o notebooks, que venden en la actualidad más unidades que los ordenadores de escritorio, y la situación se inclina cada vez más a su favor.
¿Y por qué es importante este detalle? Porque los videojuegos más extremos, aquellos donde se busca lograr el máximo realismo, la mayor emoción, precisan de lo máximo de lo máximo en cuanto a recursos y potencia de hardware. Pero los portátiles, a usos tan extremos, levantan temperaturas con las que podrías freir un huevo en su tapa, de modo que habrá que pensar en hardware específico para portátiles para gamers, lo cual al ser un poco de nicho elevaría demasiado los costos.
Hay en la actualidad buenos portátiles para gamers con sistemas especiales de refrigeración liquida similares a los utilizados en la industria automotriz, pero sus precios superan hasta en 10 veces los de las mejores consolas.
Volver al ordenador PC un gadget tan omnipresente tal vez le esté jugando en contra, como vemos. ¿No sería más fácil tener un dispositivo para cada cosa? Jugar, para domótica y automatización del hogar, para trabajar. Que el hogar estará totalmente interconectado entre todos sus dispositivos y electrodomésticos es inevitable, y nuestro querido amigo Bill Gates ha ganado aquí otra batalla.
Pero con un sistema más modular sería mucho más fácil el recambio, reemplazo y actualización, que en un sistema donde haya un dispositivo como el PC que realice casi todas las tareas. Pero atención, que para los ordenadores no todas son cosas negativas. No por nada es “el rey” desde hace tantos años, atributos y condiciones no le faltan. En primer lugar, y porque siempre la economía es importante, hay que destacar su bajo costo de desarrollo. Tanto para los fabricantes como para los desarrolladores de videojuegos, y hasta para los usuarios, que amortizan con creces la compra de un ordenador.
Hoy, en días en que todo el mundo tiene un ordenador PC, desarrollar un videojuego en Visual Studio o Eclipse no tiene casi costo en el caso del primero, mientras que el segundo es totalmente gratuito. En las consolas, en cambio, los kits de desarrollo son propietarios y sus costos demasiado elevados, lo que conspira contra pequeños desarrolladores, algo que si vemos con frecuencia en el mundo PC. Y al estar el mercado en manos de pocos, ya se sabe lo que puede pasar.
Para cambiar un poco las cosas y darle más oportunidades a la PC, han surgido en los últimos tiempos otros “mercados” para el mundo de los videojuegos en ordenador.
Como el de las redes sociales, con Facebook a la cabeza, que ha sido la primera de estas redes en liberar sus API´s para que todos puedan desarrollar aplicaciones (lease videojuegos, aunque también fue util para el crecimiento de los gadgets). Luego todos abrieron sus especificaciones, como MySpace, y también llegaron OpenSocial, The Social Gaming Network y Zynga. Y en el mundo de los juegos flash, en línea y de rol, como Second Life, puede estar el futuro que salve a los videojuegos en el ordenador.
Aquí queremos dejar algo bien en claro, y es que los videojuegos más fuertes y realistas no van a desaparecer del mundo PC, pero serán un mercado muy de nicho, y siempre hablando de un lapso de tiempo de alrededor de 5 años para arriba.
Y para ese entonces, los videojuegos sociales serán una verdadera explosión, que hará olvidar que videojuegos como Doom 5, Halo 6 o Duke Nukem (si, finalmente llegará!) se jugarán solo en las consolas. Y no es poca cosa pensar en videojuegos de rol ¿Hay algo más divertido que el Managerzone? Lo dudamos seriamente.
Las cosas cambiaron, y de ser el dominador total hoy el ordenador ha reubicado de a poco su posición en el hogar, importante, pero compartida con otros dispositivos.
En Japón, que siempre es tomado como referencia de lo sucederá aquí en Europa en algunos años, los adolescentes casi no utilizan los ordenadores PC. La respuesta que dan ante la pregunta de las causas es que no les divierte, es grandote, pesado, y que todo lo que hacen con el lo pueden hacer con sus móviles o consolas. Claro, estos chicos no se donde harán sus tareas escolares, pero más allá de este detalle no hay que perder de vista esa realidad.
En lo personal, creo que el ordenador PC tiene garantizada la subsistencia, aunque irá mutando para adaptarse a las necesidades que el mercado imponga, y “delegando” tareas en otros dispositivos más específicos, como consolas para jugar, reproductores Blu-Ray para ver películas, etc.