Hasta ahora, todo lo que hemos visto al respecto son conceptos. Que un smartphone trabaje lado a lado con un ordenador, involucrando simples toques físicos, pantallas compartidas y transferencias de archivos con gestos son funciones que aún deben materializarse, pero el Tangible Media Group del MIT ya se encuentra trabajando en algo similar, y lleva el nombre de THAW.
Si quisiera transferir archivos a mi smartphone en este instante, las rutas principales serían dos: Conectarlo al ordenador con su cable USB correspondiente, o usar una solución inalámbrica como AirDroid, que nos ahorra la conexión física. Ambos métodos funcionan muy bien, pero hay un detalle de fondo que permanece inalterable: No hay ni una pizca de interacción entre ambos sistemas. Seamos honestos: Entre los dispositivos móviles existe algo que pertenece al mundo de la ciencia ficción, y es la interoperabilidad. Sus fabricantes hacen todo lo posible para entregar entornos estables y seguros, sacrificando flexibilidad y funcionalidad en el proceso. Si dos smartphones de diferentes compañías no pueden trabajar juntos aún perteneciendo a la misma categoría, lograr que un smartphone trabaje junto a un ordenador parece mucho más difícil de lograr… ¿o tal vez no?
Con esa pregunta en mente, nos encontramos a THAW, un proyecto que pertenece al Tangible Media Group del MIT. El término oficial es “sistema de interacción”, pero el vídeo habla por sí solo. Con sólo acercar el smartphone a la pantalla, THAW permite transformarlo en un portapapeles físico, desplazando archivos y carpetas en cuestión de segundos. También puede clonar el contenido de la pantalla, o servir como control para modificar parámetros de luz y color en imágenes. Después, THAW hace que el smartphone funcione como un “límite físico” dentro de un videojuego, asumiendo el rol de plataforma o soporte, dependiendo de cada escenario. Otras opciones son las de convertirse en “atajo” para el personaje principal, o en un filtro que reduzca la velocidad en secciones muy difíciles de superar.
Gracias a los sensores integrados al smartphone, THAW ofrece cuatro grados de libertad, y el patrón de rastreo (registrado por la cámara principal del smartphone) puede ser enmascarado sin mayores inconvenientes. Por ahora, THAW no es más que un proyecto de investigación, o sea que no hay una intención inmediata de lanzarlo como un paquete de software, un kit de desarrollo o algo parecido, pero eso puede cambiar rápidamente, y estoy convencido de hay muchas ideas esperando a esta herramienta.