Escribir o navegar en una pantalla táctil tiene pros y contras, y entre los últimos está la recurrencia con la que la detección del tap con la yema del dedo o con un lápiz táctil equivoca la intención de las acciones por falta de sensibilidad. Un prototipo de sensor táctil más inteligente está despertando, y en TapSense se ven sus bases, al basar la detección de tacto con el sonido que este realiza sobre la pantalla. De esta forma el dispositivo podrá saber si tocaste la pantalla con la yema del dedo, un nudillo, la uña o con un objeto de ciertos materiales.
Desde que el mundo es mundo sabemos con seguridad del potencial y de los resultados que tiene la relación kinésica entre cuerpo y máquinas. Ahora, dada la que se podría llamar la tercera o cuarta revolución industrial, las manivelas de las moliendas se han convertido en dispositivos táctiles que sólo requieren de una huella posicionándose sobre sus botones para lanzar la producción y hacer el trabajo que antes demandaba fuerza manual. Teniendo esto en cuenta, muchos inventores han entendido que dadas determinadas circunstancias, la utilidad de un sensor táctil que pudiera diferenciar la parte de la mano con la que lo estamos tocando podría ayudar a evitar errores (algo así como la clásica lectura de la palma de la mano en algunos trackpads). Ideal para evitar desde escribir mal un mensaje a ejecutar un proceso industrial a destiempo. De esto se trata TapSense, un sensor táctil más inteligente; que puede detectar y asignarle distintas acciones a diferentes partes de tu mano.
La tecnología detrás de TapSense permite básicamente distinguir con qué se está tocando la pantalla, interpretando esto gracias a un motor de detección de sonido. Lo que esto significa es que al tocar la pantalla táctil con diferentes partes de la mano, estas harán un ruido diferente –aunque a nosotros nos parezca similar a poca presión y velocidad-. Este sonido será detectado por la aplicación de manera casi instantánea y el resultado se verá reflejado en las acciones que desencadene. Por ejemplo, y tal como se muestra en el vídeo, la yema de tu dedo podría usarse como navegación sobre una bandeja de correo electrónico, la punta del mismo para seleccionar la opción deseada y el nudillo para abrir un menú contextual haciendo de un clic secundario muy práctico para pantallas táctiles de escasas proporciones. Lo mismo para la redacción, ya que podría activar mayúsculas con la uña mientras escribes con la punta, borrar con el nudillo, cambiar a números con la yema, entre otras configuraciones posibles y en otras aplicaciones.
Según los investigadores y desarrolladores de la Carnegie Mellon University, lo que hace TapSense es aumentar el ancho de banda de entrada en un 100%, con lo que se le podría sacar más provecho a las pantallas táctiles más pequeñas. TapSense utiliza un micrófono para detectar los diferentes sonidos, que también pueden ser de madera, polietileno expandido y acrílico, logrando incluso la detección y asignación de diferentes acciones en un mismo programa para objetos como lápices o varillas. Según los investigadores, TapSense puede detectar los sonidos con un 95% de eficiencia y puede diferencia entre una pluma de escribir y un dedo con una eficiencia del 99%. ¿A ti qué te parece? ¿En qué actividades podría ser útil este sistema?