Aunque Google quiere que los coches del futuro se manejen solos, estudiantes de una Universidad holandesa diseñaron un prototipo de un vehículo de transporte público de lujo, con comodidad y eficacia en mente. El Superbus podría viajar a 250 kilómetros por hora, con 23 pasajeros en su interior y todo tipo de confort, desde televisiones LCD, consolas de juego, sistema de climatización y conexión a Internet.
Hace unos meses hablábamos de las estadísticas que indican que los jóvenes no están interesados en comprar coches, lo que mostraba un peligro para las fábricas a largo plazo. Siguiendo la misma línea de pensamiento, podríamos intentar deducir qué tipo de vehículo utilizarían y el Superbus parece la mejor opción. Este vehículo de lujo es un concepto que podría cambiar para siempre el transporte público.
El Superbus fue diseñado por un grupo de estudiantes de origen holandés, en la Universidad Tecnológica de Delff y fue presentado para la feria IAA. En cuanto a diseño, a primera vista, el vehículo parecería un cruce entre el Batimóvil y una limusina, ya que tiene seis ruedas a lo largo de la carrocería, hecha a base de materiales livianos. Como es de esperarse, tendría menos lugar que un autobús, solo para 23 pasajeros, pero también estaría equipado con ochos puertas, lo que lo haría mucho más cómodo para entrar y salir.
Con 15 metros de largo y sin una ruta predefinida, el Superbus apuntaría a ser un vehículo muy flexible, acomodando su ruta dependiendo de los puntos de partida y el destino de los pasajeros. Y como buen transporte de lujo, en su interior guarda todo tipo de comodidades, desde asientos individuales para poder trabajar durante el viaje, hasta conexión a Internet, televisiones LCD, sistema de climatización y consolas de juego. Todas estas comodidades mientras viaja a una velocidad máxima de 250 kilómetros por hora.
Además, sería un vehículo eléctrico que utiliza motores eléctricos alimentados por una batería de polímero de litio. La manera de acceder a este vehículo, sería a través de un teléfono móvil contratando el servicio y llegaría hasta la puerta del cliente para llevarlo a destino. Como se puede ver en el vídeo de la parte superior, el Superbus ya existe, pero se encuentra en etapa de pruebas, asegurándose que las medidas de seguridad, como el sistema anti choques, sensores y radares funcionen como corresponde, aún así, suena como una apuesta muy interesante para quienes puedan acceder al servicio.