La bicicleta ha estado entre nosotros por más de doscientos años, y aunque los modelos actuales pueden parecer muy similares entre sí, siempre hay lugar para la innovación. Así ha quedado demostrado con algunos prototipos de bicicletas sin cadena, pero la Stringbike de origen húngaro bien podría convertirse en una opción comercial viable. ¿Cómo es que funciona? En vez de la clásica cadena, la Stringbike recurre a cables de acero, eliminando factores como la grasa y la dificultad a la hora de quitar la rueda trasera.
Conozco una cosa o dos sobre bicicletas, pero admito que estoy muy por debajo del nivel de un aficionado. Algunas reparaciones son preferibles que las haga un profesional (después de todo, alguien va a subirse a la bicicleta), mientras que elementos como el freno a contrapedal son un verdadero misterio para mí. Sin embargo, cualquiera puede notar que las bicicletas han ido cambiando con el paso de los años, tal vez no de forma radical, pero sí perceptible. Algunos conceptos se han ido perpetuando con los modelos, por lo que una bicicleta sin cadena puede parecer algo en verdad extraño. Sin embargo, ya se han visto algunos intentos flotando en la Web, los cuales podrían ser perfectamente viables como opción comercial. El modelo conocido como Stringbike es uno de ellos.
La Stringbike reemplaza la típica cadena con cables de acero conectados a poleas, y unos discos especialmente diseñados para la transferencia de fuerza. Los discos reemplazan a los típicos platos en otras bicicletas, y pueden ser intercambiados según la necesidad del usuario. El concepto de cambios también ha sido simplificado, ya que es posible obtener una marcha diferente con sólo variar la altura de las poleas. Otro detalle interesante es que un usuario puede instalar los cables de forma asimétrica. Por supuesto, la forma más eficiente de transferencia es utilizando ambas piernas de la misma forma, pero alguien lesionado puede transferir parte de la carga de una pierna a otra, y seguir utilizando la bicicleta.
Como si eso fuera poco, las ruedas de la bicicleta pueden ser fácilmente quitadas para ahorrar espacio y facilitar el transporte en un vehículo. Muchos usuarios arrojan maldiciones al aire cada vez que deben lidiar con una cadena repleta de grasa y una caja de cambios que complica aún más las cosas, pero tal y como muestra el vídeo superior, quitar la rueda trasera en la Stringbike es algo muy sencillo. No estamos seguros de cuándo podría estar disponible al público, pero si los costos de producción y el precio final se mantienen en un nivel razonable, no debería pasar mucho tiempo. Personalmente creo que preferiría a una bicicleta un poco más ortodoxa, aunque todo se reduce al nivel de conveniencia. Si es más barata y más fácil de mantener, bienvenida sea.