La venta de juegos en línea ha ingresado a una nueva fase. Después de que California aprobó una nueva ley que obliga a identificar correctamente la «adquisición de licencias», estamos observando algunas respuestas oficiales. Una de ellas llega a través de Steam: Ahora, su sección del «carrito» advierte al usuario que la compra de un producto digital otorga una licencia dentro de la plataforma. Un cambio simbólico, pero muy importante para recordar la situación de nuestros juegos…
A principios de este mes hablamos sobre la ley AB-2426 del estado de California, que busca limitar el uso de expresiones como «buy» o «purchase» para los procesos de renta o adquisición de licencias en productos digitales. Si consideramos el tamaño de California (sería la quinta economía mundial como país independiente), el impacto de la ley no es menor, pero técnicamente entra en vigencia el año que viene. Ahora, eso no le impide a las principales plataformas adelantarse a los cambios, y las primeras señales llegan vía Steam.
«La compra de un producto digital otorga una licencia para el producto en Steam»
Este mensaje aparece en la sección del carrito, debajo del precio. También incluye un enlace al llamado «Acuerdo de Suscriptor a Steam» (que fue actualizado recientemente), y más allá de la leve redundancia, confirma lo que ya sabíamos: Steam otorga licencias, no propiedad. En lo personal, no puedo asegurar que esto sea suficiente para cumplir con los requerimientos legales de AB-2426, pero parece ser un paso en la dirección correcta.
Ahora, la pregunta es: ¿Cómo nos sentimos? Tengo 179 juegos. La mayoría de ellos siguen clavados en «cero horas», pero si algo le pasara a Steam, me sentiría furioso por perder títulos como Alan Wake, Astroneer, Blasphemous, los Borderlands, Carrion, Don’t Starve, Doom 2016, Jedi Fallen Order, las diecisiete versiones de Skyrim (!), y muchos más. Además, las licencias también pueden recibir algo equivalente a un límite artificial o fecha de vencimiento, una posibilidad espantosa y aberrante (que ya hemos visto en acción, como el «número de activaciones» en algunos títulos).
Entonces, ¿qué es lo que sigue? ¿Continuamos aceptando este statu quo de «comprar sin ser dueños»? ¿Debemos apoyar a plataformas como GOG que ofrece copias offline, y reclamar que otras sigan el mismo ejemplo? ¿O acaso llegaremos al extremo de crackear nuestros propios juegos? Los comentarios están abiertos.
Fuente: Engadget
Yo, gracias a Neoteo conocí a GOG allá por el 2007, 2008. Desde entonces he comprado juegos DRM-Free, y me la he pasado esquivando o recomprando (cuando salen) la versión de GOG. Me he acostumbrado tanto a esto que son contados los juegos que tengo en Steam, me he mantenido así, lejos de las novedades, y los DRM; y mi vida ha sido muy feliz.
Esto es tanto con juegos antiguos como nuevos (digamos, algo que haya salido de 2018 para acá)? O solo con los antiguos?
En el momento en el que confiamos en servicios de terceros ya estamos expuestos a tener que acatar sus normas o coger la puerta. Esto siempre será así. Lo bueno es que hay organismos reguladores que velan por nuestros intereses, aunque el equilibrio entre las diferentes contrapartes nunca es fácil.
Y respecto a Steam sigue siendo mi store favorita, que desde sus inicios no ha parado de mejorar. Espero que siga así por mucho tiempo.
Siempre se pude quita el polvo al antiguo parche e izar a velas. No es lo ideal y surcar mares siempre es un peligro pero almenos que salga mas alternativas, GOG es una. tocara volver.
En realidad no son compras sino un pago de una renta indefinida e interrumpible unilateralmente del lado de la plataforma, casi siempre sin devolución de nada.