Lisandro Pardo
Es perfectamente normal que algunos programas se inicien junto al sistema operativo. El verdadero problema aparece cuando tenemos demasiados de estos programas, luchando por iniciarse lo más rápido posible. Además de cancelar aquellos inicios que no son tan críticos para el ordenador, también deberías considerar alterar su orden, e incluso demorar su ejecución por algunos segundos con un programa como Startup Delayer.
Administrar los recursos de un ordenador puede ser una tarea tediosa en un principio, pero la realidad indica que es una de las mejores cosas que podemos hacer para mantener en un nivel óptimo al rendimiento, especialmente cuando una actualización de hardware no está planeada en el corto plazo. Reconozco que todo sistema tiene un límite de optimización, sin embargo, hay que hacer todo lo posible para alcanzar ese límite.
Por eso, si has notado que tu ordenador tarda en iniciarse un poco más de lo normal, hay varios detalles a tener en cuenta. Tal vez necesite de una desfragmentación, o puede que muchos programas traten de ejecutarse al inicio simultáneamente. Algunos de ellos son simples sistemas de notificación secundarios que devoran recursos innecesariamente (quienes hayan comprado una portátil con programas pre-cargados saben bien de qué hablo) y que pueden ser quitados sin mayores problemas, pero también se puede jugar con el orden y la demora en la ejecución de cada uno.
Cómo demorar el inicio de aplicaciones en Windows
Para eso, solamente necesitas a un programa como Startup Delayer. Tras su ejecución verás una lista con los programas que inician junto al ordenador, además de una sección con procesos y servicios. Startup Delayer ofrece dos tipos de demora: Automática, que estará basada en el uso del CPU; y manual, en la que podrás asignar arbitrariamente el tiempo que un programa debería esperar para ejecutarse. Si los programas que se inician con tu ordenador son muchos, primero sería recomendable reducir la cantidad, y luego, ordenar los procesos para que aquellos con una prioridad menor (por ejemplo, el sistema de actualización de Java o el reporte de tinta de una impresora) tarden un poco más en iniciarse.
Existe la posibilidad de que algunos procesos no se sientan muy cómodos con esta demora forzada que impone Startup Delayer (en lo personal, dejaría en paz a los antivirus y otros paquetes de seguridad). En caso de que veas uno que se comporte de forma extraña, sólo debes quitarlo de la lista de demora y regresarlo a la sección de ejecución normal.
Startup Delayer tiene dos versiones, Estándar y Premium; y aunque la Premium agrega más opciones de respaldo y perfiles de inicio, debo decir que la versión Estándar funciona bastante bien. El programa es compatible con Windows a partir de XP, en ediciones de 32 y 64 bits, y cuenta con soporte para varios idiomas, entre los que se incluye el español.
