Hace un tiempo que calificamos al KMPlayer como el mejor reproductor después de tres rondas de batallas entre los mejores exponentes que hay disponibles. Sin embargo, eso no quiere decir que nos hayamos estancado en una sola aplicación, y que no estemos vigilando de cerca a otras ofertas. Así es como encontramos a Splash Lite, un reproductor de vídeo con una apariencia muy agradable, una interfaz sencilla, y excelentes opciones de aceleración por hardware. A pesar de que todavía posee algunos bordes filosos, y de que esta versión apenas sea el puente para una versión comercial más elaborada, posee un potencial muy interesante que esperamos sea aprovechado.
Los reproductores multimedia han evolucionado mucho desde nuestra última comparación, no sólo sus versiones mejoradas, sino también por la clase de contenido que los usuarios visualizan hoy en día. Los vídeos 720p y 1080p son cada vez más comunes, y de la misma forma que el hardware debe adaptarse a este contenido, también debe hacerlo el software. Salvo requerimientos específicos, los códecs son considerados una cosa del pasado a la hora de reproducir vídeo. Puede que existan algunos vídeos renegados que demanden la presencia de un códec especial, pero en la gran mayoría de los casos, opciones como KMPlayer y el nuevo VLC pueden cubrir esa necesidad a la perfección. Aún así, siempre estamos a la búsqueda de otras opciones. La última versión de VLC tiene más de un mes, pero KMPlayer no se actualiza desde septiembre del año pasado. Si quieres probar otro reproductor y deseas tener alternativas a la mano, deberías darle un vistazo a Splash Lite.
Con poco menos de 9 MB de instalador, Splash Lite sólo debe agregar un componente adicional en caso de no estar presente (las librerías de Visual C++). Una vez dentro del programa, el usuario será recibido con un aviso que activa la aceleración por hardware de vídeo, en caso de que el soporte se encuentre disponible. El programa puede acelerar vídeo en hardware ATI, Nvidia, e incluso Intel, pero deberán consultar el FAQ de Splash Lite en su sitio oficial para ver la lista de hardware compatible. Una vez en su interior, notarán que la interfaz es muy sencilla, y cuenta con pocos controles, en comparación con otros reproductores. No hay controles como brillo o contraste, ni tampoco filtros avanzados que puedan mejorar la calidad del vídeo o atenuar sus deficiencias, pero sí posee un sistema para corregir audio o subtítulos que se encuentren fuera de sincronización.
Otro detalle que definitivamente será algo para corregir en Splash Lite es su consumo de memoria. Si bien se puede asumir que ahora los ordenadores cuentan con una razonable cantidad de RAM disponible, esto no justifica que el reproductor se lleve 155 MB de RAM en promedio cada vez que reproduce un archivo. El consumo de CPU es en verdad bajo, pero no tiene sentido liberar al sistema por un lado si se lo perjudica tanto por el otro. Splash Lite sirve como puente para una versión comercial con mayores capacidades que verá la luz en marzo próximo. Esperamos que la versión Lite sea mejorada con más funciones, ya que actualmente existen alternativas gratuitas todas las funciones ausentes en Splash Lite, y más. Si el consumo de memoria es controlado, y se agregan algunas opciones básicas como brillo y contraste (y sería excelente contar con un ecualizador para audio), Splash Lite podría convertirse en un excelente reproductor. Todo depende de sus desarrolladores.