Una parodia afilada y autocrítica de la sociedad actual. Matt Stone y Trey Parker en su máxima expresión, dos rebeldes con causa que no se callan nada. South Park se comenzó a emitir allá por el año 1997. Al comienzo, la serie era muy diferente a como la conocemos hoy en día. En los primeros episodios teníamos a unos críos malhablados que, desde su génesis, escandalizaron a la opinión pública. ¿Cómo podía ser que un dibujo animado tuviera tantas malas palabras? Pero Stone y Parker tenían pensado ir más allá, querían empujar los límites de la televisión y probar si realmente existía eso de la “Libertad de expresión”. Hoy, la dupla rememora:
Trey Parker: “Si miras la primer temporada ahora, la podrías poner al término de Plaza Sésamo”
Matt Stone: “Sí, eran pequeños y divertidos Teletubbies”
La primera temporada tenía malas palabras y muchos gases intestinales, pero nada más. Con el paso de los episodios y mientras Matt y Trey ganaban la confianza de Comedy Central y de sus televidentes, la cosa se fue poniendo cada vez más candente. El enfoque de la serie cambió luego de la película animada de South Park, South Park: Bigger, Longer & Uncut. “Cuando hicimos la película de South Park cambiamos los límites de lo que podíamos hacer, porque los límites son diferentes para el cine”, confiesa Matt Stone en una entrevista para la revista Reason. A partir de entonces, la serie se convirtió en la crítica dura y ácida que conocemos. El hecho de que South Park: Bigger, Longer & Uncut estuviera nominada para el Oscar en la categoría Mejor Banda de Sonido, les dio el coraje necesario para embarcarse en tamaña tropelía.
Y si el dúo tenía pensado poner a prueba los límites de la Libertad de Expresión, en las últimas dos temporadas lo lograron. En Bloody Mary, el episodio 14 de la novena temporada, por ejemplo, hicieron que una estatua de la Virgen Maria defecara sangre en la cara del Papa Benedicto XVI, como parte de un supuesto milagro. El Papa, al término del capítulo, desestima a la Virgen sangrante alegando que la sangre no le provenía del ano, sino de su… vagina. ¡Y no hay nada de milagroso en que una mujer sangre por su vagina! Ay. Como era de esperarse, los católicos pusieron el grito en el cielo (nunca mejor dicho) y Comedy Central jamás volvió a emitir ese episodio como parte de las repeticiones.
Otro problema tuvieron con el episodio que criticaba a la Iglesia de la Cientología, Trapped in the Closet. En este, Tom Cruise y John Travolta eran retratados como gays resentidos y mostraban la verdad del culto de las estrellas. Viacom, multimedio dueño de Comedy Central, que en su momento estaba filmando Mission Impossible 3, llamó a la cadena y la obligó a sacar el capítulo del aire. Todo por pedido de Tom Cruise, lógicamente. Trapped in the Closet también logró que Isaac Hayes, quien ponía la voz a Chef, uno de los más veteranos actores del show, presentará su renuncia. Isaac Hayes es cientólogo y se ofendió muchísimo con el episodio. Pero Matt Stone y Trey Parker tuvieron su venganza. En Return of the Chef, y usando voces recicladas Hayes, mostraron a un Chef que se unía al bando del mal y que pretendía abusar sexualmente de los niños de South Park.
Nada, ni nadie, se ha salvado de la crítica mordaz de estos individuos. Así como cayeron los católicos y los cientólogos, lo hizo el Islan, los de extrema derecha, los de extrema izquierda, los ambientalistas, Padre de Familia (Cartoon Wars), Los Simpsons (The Simpson did it), la Guerra contra el terrorismo, Bush y Kerry, entre muchísimos otros. Sin embargo, en South Park siempre vence el sentido común. No hay una agenda política detrás de los episodios. “El show está diciendo que hay un punto medio, que es en el que la mayoría de nosotros vivimos.”, admite Parker. “Los extremistas son los que tienen los micrófonos porque son los más interesantes para escuchar.” Y eso es lo que hace a esta serie tan interesante. No importa que sea lo que hagan, que aberraciones muestren o de quien se burlen, el sentido común y la razón siempre triunfan, incluso a pesar de los protagonistas.
South Park es una serie obligada para todo aquel con sentido del humor y autocrítica. Si eres de los que se ofenden fácilmente, más vale que la dejes pasar. Si te animas, puedes encontrar las diez temporadas desde este MrTwig. Después de todo, tanto Trey Parker como Matt Stone están a favor de que los fanáticos descarguen sus capítulos: “Siempre estamos a favor de que la gente descargue nuestros episodios. Siempre.”, aseguró Stone en una entrevista. “Trabajamos mucho para hacer el show, y la razón por lo que lo hacemos es porque queremos que la gente lo vea”, remata Parker.