Mofiria es una nueva tecnología de autenticación de personas mediante una lectura de la disposición de las venas de sus dedos, que la empresa Sony podría incorporar a los dispositivos móviles el próximo año. Está basado en una cámara que utiliza un sensor CMOS, y puede identificar a una persona en no más de 0.015 segundos. Según Sony, esta tecnología de autenticación no solo es mucho más fiable que cualquier otro sistema de seguridad biofísico, sino que pueden efectuarse lecturas más rápidas.
¿Huellas dactilares? ¿Exploraciones de retina? Olvídalo. La manera más “top” de identificar a una persona es la lectura de la forma en que se ramifican las venas de sus dedos. O al menos, eso cree Sony, que acaba de anunciar un sistema denominado Morfiria que promete hacer nuestros gadgets prácticamente inviolables.
Preservar con seguridad la integridad de los datos que guardamos en nuestros teléfonos móviles (cada vez más parecidos a un ordenador) o en nuestras computadoras requiere de la memorización de contraseñas complejas, que sean capaces de resistir un ataque por fuerza bruta. Esto es particularmente problemático cuando el dispositivo en cuestión está conectado a Internet. Si el sistema de Sony tiene éxito, el recordar contraseñas será algo del pasado: bastará con que llevemos nuestros dedos con nosotros.
Según los analistas de Sony, la tecnología de autenticación basada en la disposición y ramificación de las venas de un dedo del usuario no solo es mucho más fiable que cualquier otro sistema de seguridad biofísico, sino que pueden efectuarse lecturas más rápidas. Tal como ocurre con los pliegues de la piel que dan lugar a las huellas digitales o los patrones estampados en nuestras retinas, las venas difieren de una persona a otra y su disposición no cambia con los años. Esto le permitirá a quienes implementen Morfiria realizar transacciones comerciales con total seguridad desde una notebook con conexión wifi o incluso desde teléfonos móviles, ya que el sistema es lo suficientemente pequeño como para ser admitido “a bordo” de uno de estos cacharritos.
Parece que diferenciación entre las venas de una y otra persona es lo suficientemente grande como para que Morfiria tenga un índice de falsos rechazos menor al 0.1 por ciento. Además, es muy fácil de leer, gracias a la utilización de una luz infrarroja potente y un sensor CMOS similar al que incorporan las cámaras digitales. Según Sony, Morfiria puede identificar a una persona en solo 0,015 segundos cuando corre en un ordenador, y en un cuarto de segundo si se ejecuta sobre un teléfono móvil. Realmente, es bastante más rápido que introducir una larga contraseña.
Un detalle muy importante es que no se necesita tener el dedo colocado siempre de la misma forma frente al sensor, tal como ocurre con los sistemas actuales de identificación por huellas digitales. En Morfiria, el software es lo suficientemente inteligente como para “rotar” el “mapa” obtenido de la imagen y ver si encaja con los datos que están almacenados en el perfil del usuario.
Sony no ha sido la primera compañía en intentar diferenciarnos gracias a nuestras venas. Hace algunos meses Fujitsu lanzó un ratón que hace lo mismo que Morfiria, pero leyendo las venas de la palma de la mano.