Estamos a poco menos de dos meses del lanzamiento de Skyrim, y la espera se está haciendo intolerable. Considerado como “juego del año” incluso antes de su debut, el próximo título de Bethesda promete ser la joya que salve un 2011 bastante pálido en materia de videojuegos. Si has estado preparándote con Oblivion, si recientemente has tocado a Morrowind, si ya quieres pelear de una vez con esos dragones gigantes que dominan el cielo, aquí tienes más de veinte minutos dentro del juego, con la voz del mismísimo Todd Howard.
“Si tu objetivo es anciano y débil, espera que su guardián sea lo opuesto”, me dijo el orco. Y mucha razón tenía, porque si ese guardaespaldas llegaba a atraparme, me habría cortado por la mitad. Esta es apenas una de las tantas situaciones que debimos enfrentar en Oblivion, pero esto no será nada en comparación con los terribles dragones que cubren la luz del sol en Skyrim. Su fecha de lanzamiento no ha sufrido alteraciones, y el próximo 11 de noviembre sería el día en el cual probablemente rechacemos toda actividad social para caer bajo el hechizo de esta nueva saga de Bethesda. En estos últimos meses se han podido ver pequeños bocadillos de “gameplay”, pero en esta ocasión, tenemos frente a nosotros aproximadamente 22 minutos de vídeo, divididos en tres partes.
Como voz en “off” podemos escuchar a Todd Howard, mente maestra y rostro visible del desarrollo de Skyrim. La versión que le dio forma a esta demo corresponde a la plataforma Xbox 360, por lo que es probable que el producto final tanto en PC como en PS3 tenga algún que otro ajuste, adaptado a los controles de cada sistema. La llegada a un apacible pueblo nos muestra algunas de las actividades de los locales (“¿Quieres trabajo? Consigue un hacha, y tráeme toda la madera que puedas cortar”), pero rápidamente saltamos a la acción, con bandidos, seres de ultratumba, el troll de turno, y el infaltable hechicero que ve su descanso interrumpido y que puede invocar Atronachs con la punta de sus dedos.
Si eso no parece suficiente, el duelo no con uno sino dos dragones marcan un final excelente para esta demostración. Las Palabras de Poder serán una herramienta vital a la hora de derrotar a estos gigantes de los cielos, pero queda claro que habrá que trabajar bastante para liberar a cada una de las “porciones” de una palabra. Morrowind podía ser quebrado fácilmente. Oblivion requería de un esfuerzo mucho más prolongado, pero eventualmente podías obtener un personaje invencible. Honestamente espero que me hagan la vida imposible en Skyrim. Aprender desde cero toda la mecánica de nivelación (parecida a la de Fallout 3 y New Vegas, según sus desarrolladores) será un gran desafío para armar a nuestro personaje perfecto, o al menos, para no terminar como el desayuno de un dragón.