Las compañías de aviación luchan a capa y espada para reducir costos, lo que ha dado lugar a decisiones, ideas y patentes muy controvertidas. Por otro lado, también deben competir entre sí, y el pasajero que está dispuesto a pagar un poco más es un blanco demasiado tentador. Eso representa la necesidad de brindar una experiencia muy superior a la normal, y para lograrlo, la gente de Windspeed propone a SkyDeck, una cúpula especial en la que un pasajero podrá disfrutar de una vista privilegiada, en 360 grados.
Una adquisición recurrente entre la mayoría de los multimillonarios es el avión privado. Algunos prefieren tomar los controles, mientras que otros simplemente lo usan como transporte personal. Independientemente de la situación, estos acaudalados forman una de las principales líneas vitales para la industria de la aviación, que busca satisfacer exigencias y mejorar la experiencia de vuelo al mismo tiempo. Tampoco debemos olvidar a las aerolíneas. Últimamente, sus noticias se reducen a métodos para reducir los espacios en los asientos, colocar más gente en una misma fila o cobrar por el uso de los baños, pero sería una verdadera locura si ignoraran al llamado «viajero VIP» que demanda algo diferente.
¿Qué tan diferente? Bueno, la compañía Windspeed tiene algo mente. Su nombre es SkyDeck, una cúpula transparente especial ubicada en el «techo» del avión, a través de la cual dos pasajeros pueden acceder a una vista única durante el vuelo, incluso mejor de la que tienen los propios pilotos. El concepto SkyDeck viene en dos versiones, una que desplaza a los pasajeros con un pequeño elevador, y otra más simple con una escalera. En ambos casos, los pasajeros contarán con la opción de rotar sus asientos, y disfrutar del vuelo en 360 grados.
Windspeed anticipa múltiples variantes de su sistema SkyDeck, incluyendo una edición compacta para un sólo pasajero. La compañía indica que el SkyDeck puede ser instalado en una amplia cantidad de aviones existentes, desde jets ejecutivos hasta los grandes titanes que dominan nuestros cielos. Además, Windspeed dice haber considerado todos los detalles en el desarrollo de la patente, incluyendo el rendimiento aerodinámico, el peso extra, la integridad estructural del fuselaje, pruebas de impacto, condensación, y el inevitable consumo adicional de combustible. Por ahora, nada más que un concepto. Dentro de algunos años, ¿quién sabe?