A principio de año, hablábamos de un dispositivo desarrollado en la MIT que tenía como objetivo integrar la tecnología a la vida diaria de las personas. Facilitando cosas ordinarias como poder hacer llamadas telefónicas con la mano y transformar cualquier superficie en una pantalla. Ahora, el creador del SixthSense, Pranav Mistry, anunció que estará lanzando el código de manera abierta y gratuita, “para que cada uno cree su propio sistema, ¿por qué no?” Exactamente Mistry, ¿por qué no?
¿Recuerdas hace varios meses cuando te hablamos del Gadget del Sexto Sentido? ¿No? Bueno, no te preocupes, para eso estamos aquí, para recordartelo. Desarollado por MIT (qué sorpresa), el gadget había sido creado con componentes que pueden encontrarse en cualquier tienda por US$350 (anteriormente la cifra era US$300). El objetivo del dispositivo es integrar la tecnología a la vida diaria como si fuese parte del cuerpo. Volviendo al presente, las últimas novedades de éste fascinante aparato indican que el creador, piensa liberar el código para que cualquiera pueda utilizarlo a gusto.
Hasta el momento, hacer un dispositivo con partes que pueden encontrarse en cualquier tienda por un precio razonable, era un gran plan para que cada uno pueda hacer su propia versión del aparato. Pero claro, si no tienes el software que corre debajo, de poco iba a servir tener todas las piezas. Sin embargo, con esta noticia, el círculo se cierra y la visión del creador, Pranav Mistry, se hará realidad. Durante el anuncio, dijo : “Las personas podrán hacer su propio hardware. Daré instrucciones sobre cómo hacerlo. También proveeré software clave. Serán capaces de crear sus propias aplicaciones, modificar niveles básicos y hacer lo que quieran.”
De todos los dispositivos similares, SixthSense fue el que más atención llamó, por ese concepto de “hazlo tú mismo”. Pero también fue uno de los que mejor integró la tecnología en tareas diarias, como sostener un libro en la librería frente a la cámara e inmediatamente lista los precios, información del autor y las diferentes críticas que le dieron. Otro ejemplo, sería con un pasaje de avión, que dependiendo la información de la aerolínea, mostraría si el avión está llegando a tiempo. Todo esto, por supuesto, conectándose a Internet.
Ojalá pudiéramos saber cuándo piensan finalizar el dispositivo o (aún mejor) la fecha de salida del código (Mistry mencionó: “en los próximos meses”). Sin embargo, parece que eso por ahora no podrá ser y no habrá otra más que esperar. Aún así, nos parece estupendo que Mistry haya tomado la decisión de compartir su creación con el mundo, en vez de encapsularse en contratos corporativos que después hacen millones con un aparato que no tomó más que US$350 y algunas de las mentes más brillantes de ésta década.