Se vienen años en los que los gobiernos, las instituciones, las empresas y casi todo lugar público nos espiarán a través de circuito cerrado bajo la excusa de nuestra propia protección. Pero no sólo habrá una sobreprotección que no se pidió formalmente, sino que habrá un estado de alerta total, revisando cada rostro que pase por una calle o entre a un avión para saber si tiene registros criminales o es una persona buscada por alguna agencia de la ley. Una cámara de reconocimiento facial de bajo costo, como See3, presentada por Flight Display, podría ser una de las responsables de esta situación. Su composición, trabajo y el problema de su alta precisión
La sociedad ya venía encaminada a un tipo de observación supervisora por parte de sus representantes de la “justicia”, pero segundos después de ver por televisión el atentado al World Trade Center, supimos que la situación se iba a poner más complicada y la privacidad entraría en una etapa donde todos los días se vería comprometida. Y si pasa en EEUU, pasa en todas partes. Porque esas políticas se exportan junto a la cultura de ese país. Así es que a partir de ese momento las cámaras de video se comenzaron a ver apostadas por todas partes, buscando eventuales terroristas entre la gente común. A estas cámaras se les introdujo un sistema privado y casi oculto de reconocimiento facial, pero su costo operativo es muy alto y quedó reservado sólo para instituciones y gobierno. Ahora, con el surgimiento de la compañía Flight Display Systems, la tecnología de reconocimiento facial está más cerca del público gracias a esta versión de bajo costo.
La cámara en cuestión, llamada See3, está compuesta por la cámara y un ordenador, ambos se benefician del trabajo conjunto con el software de reconocimiento facial Linus Fast Access, pero además incluyen un paquete de algoritmos en código propietario de Flight Display. La cámara es bastante accesible para la instalación y puede instalarse tanto en la puerta de tu hogar como, preferentemente según el desarrollo de este producto, en la puerta de los aviones para reconocer a las personas que suben y lanzar alertas en caso de encontrarse con alguien que esté en la lista de pasajeros no deseados. La base de datos es amplia y See3 revisa 100.000 valores diferentes para decodificar una cara, y todo desde una instalación casi hogareña. La cámara con el software costará 9.275 dólares, algo barato en relación a las otras alternativas actuales.
El problema principal de esta cámara de reconocimiento facial de bajo costo es, bueno, su propia existencia. Pero en términos menos rebeldes y más técnicos, la complicación principal es su tasa de efectividad, que ronda entre el 75 y el 90%. Aunque parece bastante precisión, en realidad hay que pensar en la cuestión práctica de su accionar. Es decir, entre el 25-10 % de los pasajeros van a ser expulsados, detenidos o interrogados gracias a See3. Y si tenemos en cuenta que la cantidad de pasajeros no terroristas por día roza el 99.999999% de los revisados, expulsar por error a al menos 10% de ellos se convertirá en un problema de violación de derechos y complicaciones judiciales muy grande. De todas maneras, la gente de Flight Display seguirá modificando el código para hacerlo más efectivo, según prometieron.
Supongo que en los casos de una identificación positiva, pasara a operadores humanos adecuadamente preparados, para así reducir el margen de error.
En otras palabras que el 25-10 % de los pasajeros que suba con un turbante, barba y ropa tradicional musulmana…. los van a expulsar por terroristas. 😛
dia a dia tod es mas parecido a Minority Report
Es un lástima que Flight Display Systems no proporcione información suficiente sobre sus cámaras, adicional ninguna de sus cámaras tiene autofocus ni interface USB, parece ser solo una cámara barata común.