“Me gusta ese color” es una expresión bastante común, pero puede convertirse en todo un desafío para un dibujante o un diseñador que busca duplicarlo con exactitud. Nuestros ojos no son tan confiables que digamos, y las cámaras suelen hacer trampa al capturar una imagen. Con el bolígrafo Scribble, la “lectura” del color es directa, y estarás dibujando con él en cuestión de segundos.
Identificar un color que ya se encuentra digitalizado no es muy complicado a decir verdad. Cualquier editor de imágenes tiene la capacidad de reproducirlo (con funciones como el clásico Cuentagotas en Photoshop), y a partir de allí es posible trabajar con el número RGB o incluso el número hexadecimal. Ahora, cuando el color está en una tela, una fruta, una sustancia o cualquier otra cosa fuera del ordenador, todo se vuelve un poco más difícil. Una cámara digital tiende a aplicar correcciones en una fotografía alterando el color real, y un escáner tampoco escapa de esto por completo. La idea es que alguien convierta en realidad al Cuentagotas de Photoshop, y así es como llegamos a Scribble.
El bolígrafo Scribble viene en dos versiones: Una compatible con dispositivos móviles, y la otra que utiliza tinta, preparando la mezcla dentro de una cámara especial. En ambos casos, el bolígrafo posee un sensor óptico es de 16 bits, cuenta con un procesador ARM9 integrado, su conectividad es vía Bluetooth o Micro USB, y el almacenamiento asciende a 1 GB, lo que equivale a unos 100 mil colores. Los colores en la versión de tinta del Scribble pueden ser recargados individualmente (el precio estaría ubicado entre los tres y los diez dólares), su aplicación dedicada de acceso gratuito (compatible con Android, iOS y Windows Phone) permite cargar colores personalizados en el lápiz, y en lo que se refiere a su batería, la recarga completa no debería consumir más de tres horas.
Scribble ya está disponible a modo de preventa en su sitio oficial. La edición capacitiva tiene un precio de 79.95 dólares, mientras que el modelo Scribble Ink se eleva a los 149.95 dólares. Sus responsables anticiparon que habrá software compatible con Windows y OS X en el futuro, y su debut en Kickstarter está programado para el próximo 7 de julio. El precio actual recibió un 20 por ciento de descuento sobre lo que será el valor definitivo del Scribble, por lo que este sería el momento ideal para adquirir uno.