Los coches a radiocontrol son muy divertidos, a pesar de su gran lentitud. No es como que van a poder correr una carrera. A menos claro, que tengas uno como el Schumacher Mi3, creado por Nic Case y capaz de alcanzar 260.32 kilómetros por hora. Sí, no es la clase de coche para jugar en casa, sino el tipo de coche que corre a toda velocidad por una pista y apenas puedes verlo pasar.
¿Quién de pequeño no tuvo un coche a radiocontrol y fue extremadamente feliz con él? Se podía hacer de todo con esas cosas, de todo excepto claro, correr una carrera, porque si hay algo que todos estos cochecitos tienen en común, es que son muy lentos. Bueno, todos menos el Schumacher Mi3, que oficialmente es el coche a radiocontrol más veloz del mundo. ¡Y con ese nombre no es para menos!
Así es, el Schumacher Mi3, es el primer coche a radiocontrol en la historia que podría hacerle frente a un coche de carreras real. Y no es broma, ya que en la última prueba alcanzó la marca de 260.32 kilómetros por hora. Sí, no es muy eficiente para jugar, porque a esa velocidad sería imposible no chocarlo, pero es un verdadero logro para su creador, Nic Case, quien ocupó seis meses de su tiempo en este desarrollo e invirtió aproximadamente US$4,000.
Como su velocidad, su apariencia es muy diferente a la de cualquier otro coche a radiocontrol y su construcción también. El chasis está hecho de fibra de carbono, incorpora un motor de 11 caballos de fuerza y un pack de baterías de 12 celdas. En conjunto, crean lo necesario para que esta pequeña bestia alcance semejante velocidad.
Con su forma y velocidad, el Schumacher Mi3 parece un cohete sobre la pista y es un excelente logro para Nic Case, quien tiene una gran pasión por los coches y su hobbie siempre fue hacer este tipo de creaciones. Y por supuesto, este increíble logro no es el final, ya que su próximo objetivo será construir un coche capaz de alcanzar los 322 kilómetros por hora. Mientras tanto, ya tiene un importante récord en su haber.