Hoy en día la creencia general indica que cualquiera puede tomar una foto. Si tenemos en cuenta las capacidades de los móviles y de las cámaras de bolsillo para lograr esto, se podría decir que es cierto, pero cuando la calidad de la imagen resulta ser un factor supremo e innegociable, se necesitan soluciones un poco más profesionales como las cámaras DSLR. Las cámaras DSLR están entre lo mejor que se puede obtener en el mercado, sin embargo, además de ser más caras que sus hermanas pequeñas de bolsillo, también hay una cuestión de tamaño inherente a su diseño. Samsung tiene como intención unir lo mejor de ambos mundos con su modelo NX10: Las virtudes por excelencia de una cámara DSLR, y una notable reducción en su tamaño.
Ya se ha convertido en algo común el ver en cualquier evento o lugar a gente que levanta sus “iPhones” y “Nokias” para tomar una foto, mientras que otros elevan en sus manos cámaras tan pequeñas como cajas de cigarrillos. Muchos también utilizan a esos dispositivos para filmar, más allá de sus limitaciones en diseño, que suelen estar reflejadas en la calidad final del material. El “mito de los megapíxeles” ya ha quedado expuesto en la red de diferentes formas, y escoger una cámara por la “cantidad” de megapíxeles es considerado en la actualidad como una muy mala idea. Hay que informarse adecuadamente antes de adquirir una cámara, pero con un mínimo de información es fácil determinar que las cámaras DSLR superan a las típicas cámaras de bolsillo. Como era de esperarse, a las cámaras DSLR se las considera “profesionales”, algo que también es defendido por un costo más elevado. Otro detalle de las cámaras DSLR es que tienen un mayor peso y son más grandes en tamaño. Definitivamente no verás a alguien en un recital sosteniendo una cámara DSLR en el aire como si fuera un paquete de cigarrillos.
El modelo NX10 de Samsung busca concentrar en una sola cámara las mejores virtudes de ambos tipos. Se la considera híbrida porque, en primer lugar, posee una calidad de imagen comparable a la de una cámra DSLR (sin mencionar la capacidad de cambiar lentes), y en segundo lugar, porque su tamaño ha sido reducido de forma considerable. Básicamente, la NX10 carece de la “caja de espejo” y del “pentaprisma” característico de las cámaras DSLR. Con esto se logra que la NX10 sea en promedio la mitad de gruesa que otras cámaras DSLR, aumentando de forma considerable su capacidad de traslado. En otros aspectos más técnicos, la cámara cuenta con un sensor CMOS APS-C con una resolución efectiva de 14.6 megapíxeles, una pantalla OLED de matriz activa (AMOLED) de tres pulgadas, y capacidad de capturar vídeo con una resolución de 720p (H.264 a 30 cuadros por segundo), entre otros datos.
La cámara aún no está disponible, ni tampoco se conoce su precio oficial, pero se sabe que tendrá una dura competencia, ya que existen cámaras con capacidades similares en el mercado como la familia Lumix “DMC-G” de Panasonic y la famlia “PEN E” de Olympus. El que la cámara de Samsung se presente como algo “entre medio” de una cámara compacta y una DSLR no quiere decir que se trate de algo malo. No debería ser vista como una “cámara compacta en esteroides” ni como una “DSLR recortada”, sino como una nueva generación de cámaras fotográficas que, consumidores y mercado mediante, debería popularizarse pronto. Esperamos que así sea, y cuanto más amigable resulte con los bolsillos de los interesados, mejor.
