Menu
in

Robot emula mecánicamente la voz humana y canta (mal)

Si todo sigue así, los robots van a formar parte activa de este mundo, y la capacidad de expresarse de ellos será uno de los puntos rupturantes entre los robots y nosotros cuando convivamos -esperemos- pacíficamente. Para que la comunicación sea más efectiva y hasta más real, el inventor japonés Hideyuski Sawada ha creado una boca que canta, o más técnicamente; un robot que emula mecánimente la voz humana y utiliza un algoritmos para aprender a mejorarse a sí mismo. Pero además de ser bastante poco atractivo visualmente, este robot canta; aunque muy mal.

La cultura tecnológica japonesa tiene la capacidad de asombrarnos hasta que se nos desgarren los párpados o de asombrarnos de manera que queramos desgarrarnos los párpados. Los inventos a nivel robótica son incuestionables por la tecnología y el ingenio implementado, pero es en la crudeza de las formas de presentarlo donde generan un poco de escalofríos. Recordemos sino al Telenoid R1, un robot casi humanoide que podría ser tranquilamente el protagonista de una película de terror serie B.  Motivo de esta digresión personal es lo que el profesor Hideyuki Sawada de la Universidad Kawaga de Japón ha enseñado en la nueva edición de la conferencia Robotech de este año. Haciéndose de materiales sintéticos, un libro de anatomía humana y alguna reprochable referencia sobre lo que es el canto, Hideyuki ideó una boca robot que canta. O mejor dicho, que intenta cantar.

El invento a simple vista es tenebroso y no voy a discutir al respecto, pero a nivel técnico es impecable más allá del acompañamiento arrítmico de los ruidos mecánicos, ya que utiliza 8 cuerdas vocales artificiales que se modulan con el compresor de aire para generar las diferentes tonalidades. Además, y como parte vital de esta emulación robótica de la boca humana, este robot que emula mecánicamente la voz humana está dotado de una lengua de silicona y de una fosa nasal con cavidades que se abren y cierran imitando los modificadores naturales de la voz. El objetivo de primer momento fue el de emitir sonidos y palabras para pensarse como un componente más dentro de los humanoides a los que nos hemos tenido que ir acostumbrado a ver, pero la fama a la boca robot le llegó por la fluidez de los movimientos que le permiten hasta cantar canciones populares.

Sawada no se quedó con los aspectos más vistosos de su boca robot, sino que también le agregó un plus y logró que su invento aprendiera a través de un logaritmo a mejorar la rítmica de su voz, la cual es analizada inmediatamente de ser grabada en un micrófono que la boca tiene enfrente. Esto es último nos da un poco de tranquilidad al escucharla, ya que tiene como misión tratar de ser más fácil de hacerse entender ante terceros. Según Sawada, quien seguramente no compartiría conmigo la tétrica apariencia de su boca robot, el fin de este pichón de boca biónica no está definitivamente determinado, pero está abierto a que se lo pueda utilizar como componente en el tratamiento de discapacidades auditivas y expresivas.

Escrito por Nico Varonas

Leave a Reply