Un mini-copiador de ADN, que podía beneficiar sobre todo a los pobres del mundo por su coste casi ridículo, servirá para agilizar las pruebas de HIV o diagnosticar la tuberculosis.Investigadores de la universidad de la universidad A&M de Texas han aplicado técnicas de convección de flujo similares a las empleadas en las “lámparas de lava” (tan populares hace algunos años) al campo de las replicas de ADN.
Hasta ahora, eran necesarios costosísimos y enormes equipos para poder copiar un trozo de ADN. Recordemos que cuando vemos en la tele que un forense recoge un pedacito de uña o cabello para determinar una identidad mediante análisis de ADN, el primer paso es obtener millones de copias de la molécula de ADN en cuestión. Este “replicador de bolsillo” es muy fácil de construir, sus partes se consiguen por unos u$s 10, y no tiene ninguna pieza móvil.
Para generar mil millones de copias idénticas la cadena de ADN, realizar varias reacciones en cadena de la polimerasa, sometiendo el ADN a tres temperaturas distintas. El fluido se introduce dentro de un tuvo que es calentado a las diversas temperaturas necesarias. Explicado de esa manera no suena como algo demasiado emocionante, pero este dispositivo podría significar la posibilidad de que millones de ciudadanos de los países más pobres accedan a pruebas que permitan diagnosticar a tiempo varias enfermedades, incluida la tuberculosis.
Otra característica fundamental de este dispositivo es que funciona alimentado directamente de con pilas o baterías “AA”, lo que garantiza su portabilidad. Esto es algo fundamental cuando estas en una tribu de un país africano y la toma de corriente de red mas cercana esta a 2000 km.
El tiempo que demora en generar mil millones de copias idénticas de un trozo de ADN es de unos 20 minutos. Esto es mucho más rápido que las máquinas actuales, que como mínimo demoran varias horas.