Up Frontier, una compañía japonesa dedicada al desarrollo de software, se encuentra trabajando en una nueva experiencia para utilizar mediante Oculus Rift. En esta ocasión mediante el casco de realidad virtual vas a poder recostarte sobre el regazo de una chica de anime.
Japón es sin dudas el país de los fenómenos más extraños que hayamos vistos. Desde los simuladores de citas que nos permite entablar relaciones con personajes de videojuegos hasta la posibilidad de interactuar con personajes virtuales (como Hatsune Miku) mediante VR. En esta ocasión Up Frontier, una compañía japonesa dedicada al desarrollo de software, se encuentra trabajando en una nueva y extraña experiencia para utilizar mediante Oculus Rift. Ya hablamos mucho aquí de Oculus Rift, el casco de realidad virtual que fue recientemente adquirido por Facebook por ni más ni menos que dos mil millones de dólares.
En esta oportunidad Oculus Rift nos va a poder permitir colocar nuestra cabeza sobre un regazo virtual a través de una almohada física. En el vídeo se puede ver una explicación bastante técnica de cómo funciona mostrando a un usuario sentado en un sillón que se encuentra probando el casco en donde efectivamente se recuesta sobre la almohada con forma de regazo mientras lo vemos interactuar con Unity-Chan. Unity-Chan es una versión 3D de una chica diseñada en base a un personaje de anime mediante el conocido motor Unity. Dicho personaje se puede descargar libremente y utilizarlo en desarrollo de juegos.
Como se puede ver en el vídeo, en esta especie de ‘juego’ el jugador tiene que convencer a Unity-Chan para usar sus piernas como regazo. Si tenemos éxito, podremos utilizar la almohada con forma de piernas para recostar nuestra cabeza. En caso de no lograr convencerla, no sólo terminaremos abandonados sino que Unity-Chan se enojará con el jugador en un acalorado intercambio de palabras y golpes como se muestra en el vídeo. Sin duda no es la primera vez que vemos algo de este estilo en Oculus Rift. No olvidemos cuando un grupo de desarrolladores han utilizado el casco de realidad virtual para que los usuarios se conviertan en ciudadanos de South Park. Aun así, Oculus Rift es una plataforma abierta y depende de los desarrolladores en decidir cómo usarlo, pero… ¿vale la pena seguir proyectando en este tipo de cosas? ¿Tú qué opinas al respecto?
