En los últimos días de febrero, el usuario «Zephray Wenting» logró adquirir un portátil transparente diseñado para su uso en cárceles, y compartió en la Web múltiples detalles sobre su seguridad, incluyendo el password del BIOS, la lista blanca de las unidades, y su hack para acceder al USB. Hoy es el turno de Bringus Studios, a quien recordamos bien por sus GameCubes miniaturizadas y el ordenador gamer de Sega. ¿Qué fue lo que hizo? Tomar uno de estos ordenadores transparentes, instalar Ubuntu, y empezar a jugar… más o menos.
La historia del ordenador portátil para cárceles dio un giro muy particular a principios de marzo. Después de toda la información que publicó «Zephray Wenting», y el trabajo de otros usuarios como «techknight», el Departamento Correccional de Washington ordenó la recolección de 1.200 portátiles en manos de estudiantes encarcelados para la instalación de un update de emergencia. Los oficiales hablan de «prevención», pero los estudiantes están preocupados porque muchos esperan graduarse pronto, y su situación se complica sin acceso al hardware.
El artículo del Seattle Times también menciona la forma en la que estos equipos circularon en eBay (un reciclador en Milwaukee recibió 100 ordenadores, pero optó por su reventa en vez de destruirlos), y uno de ellos llegó a las manos de Bringus Studios, quien tuvo la fabulosa idea de explorar su «potencial gaming»:
Jugando en el portátil para cárceles
La aventura comienza con dos hacks, uno para alimentar al portátil (usa 12v, pero Bringus no posee el cargador correcto), y el otro para conectar un hub USB al puerto interno utilizado por el trackpad. Luego instaló Ubuntu en un SSD, y copió su sección de arranque a otro pendrive, ya que la lista blanca del BIOS impide su inicio directo.
Como era de esperarse, Ubuntu arrojó algunos errores (el teclado dejó de responder en más de una ocasión, entre otras cosas), y la instalación de Steam protestó por paquetes dañados al principio, pero después de sufrir un buen rato, Bringus logró que su interfaz se inicie correctamente. En cuanto a la selección de juegos, exploró varias obras de arte inspiradas en prisiones, para terminar con Half-Life y Half-Life 2, que funcionaron a la perfección (sí, incluso un Celeron tiene poder de fuego suficiente).
En el segundo vídeo, Bringus instaló un breakout para aprovechar el segundo puerto USB en la placa base (y restaurar así el funcionamiento del trackpad), e instalar el hub de forma más permanente… con cirugía incluida.