Habiendo visto el video de Microsoft sobre el futuro y sabiendo más o menos cómo viene el asunto de los periféricos en el presente, cuesta imaginarse con otro tipo de ratón que no sea el de ahora. Es este o no es, pues ante lo táctil y la captura de movimiento, es muy difícil pensar un modelo de ratón que sirva para algo. Sin embargo, un inventor lo hizo. Y aunque sólo él se imagina que puede llegar a ser cómodo de usar, no podemos decir que un ratón inalámbrico que levita no llame nuestra atención.
El mundo de los conceptos tiene formas particulares de tocarnos el hombro y decirnos: ¡Hey, mírame! Poniendo en juego el límite entre fantasía y realidad, entre proyecto y realización, estos conceptos exponen ideas de una manera que nunca falla a la hora de reclamar sus 15 minutos de fama. Ahora le ha tocado a un ratón y nos hace pensar en qué es lo que los actuales podrían no estar haciendo muy bien. Todos queremos controlar el ordenador con las manos porque con la mente todavía no lo podemos hacer con fluidez. La forma del ratón y la precisión que ha conseguido con los años lo hacen el instrumento perfecto, aunque lo táctil se imponga de a poco mientras que la captura de movimiento recorre el obligado camino que tiene por delante para volverse realmente útil y eficiente. Mientras tanto hay que seguir con el ratón, que ya tiene diferentes agarres, dpi, superficies, tamaños y conexiones. A ellos hay que agregar el ratón inalámbrico que levita.
Un diseñador ruso llamado Vadim Kibardin es el responsable de esta pieza conceptual de tecnología que viene a ofrecer una experiencia única para los usuarios, más allá del impacto estético que obviamente poseen todas las cosas que levitan y que encima tienen terminaciones delicadas. El ratón consta de un anillo flotante sobre una base magnética que funciona como navegador inalámbrico. El usuario pone sus manos sobre el ratón y manteniendo la altura sobre la base, comienza su navegación cotidiana pero experimentando una sensación de flotación suave que tiene el propósito de evitar patologías musculares como el síndrome de túnel carpiano, así como otras afecciones musculares de la zona de la muñeca, palma y dedos.
Con mucho énfasis en la prevención de los problemas típicos que surgen ante una sobreexposición al uso del ratón, el concepto de ratón inalámbrico que levita gustó en varios grupos de consumidores y el diseñador ha recibido propuestas de comercialización, aunque todavía no se sepa exactamente cómo lo haría funcionar perfectamente. La cantidad de imanes necesarios para mantener en flotación el ratón no es poca cosa, así que habrá que cuidar ese aspecto en la fabricación. En fin. No sé ustedes, pero yo por ahora me quedo con el viejo ratón y sólo lo soltaré el día que la tecnología de captura de movimiento sea tan efectiva que pueda hacer headshots con la mirada.
