El 15 de mayo es la nueva fecha límite para que los usuarios de WhatsApp acepten los términos de uso actualizados en la plataforma. El anuncio original fue recibido con extrema resistencia, y Facebook activó como respuesta una especie de «control de daños», tratando de explicar los aspectos más controvertidos. Sin embargo, dichos términos entrarán en efecto de un modo u otro, y millones de usuarios se hacen la misma pregunta: ¿Qué sucederá si no aceptas las nuevas condiciones de WhatsApp?
Facebook y WhatsApp: Una crisis de confianza
Al momento de escribir estas líneas, Facebook posee 2.800 millones de usuarios activos y permanece como Top 10 cómodo en Alexa. Ese número sugiere que su posición es muy saludable, pero las críticas hacia su modelo general y su forma de hacer negocios continúan multiplicándose. Desde el desastre de Cambridge Analytica en adelante, algo definitivamente se rompió entre Facebook y el público, y cada vez que la red social planea hacer ajustes a sus términos y condiciones, la Web tiembla.
WhatsApp es el siguiente campo de batalla. Facebook planea modificar sus términos de uso a partir del 15 de mayo (la fecha original era el 8 de febrero), confirmando así una integración más avanzada entre el servicio de mensajería y la estructura de la red social. Facebook repite que jamás obtendrá acceso a las conversaciones de los usuarios… pero los usuarios tienen dudas, y conociendo el pasado de Facebook, son razonables. Eso nos deja frente a una pregunta fundamental: ¿Qué sucederá si no aceptamos las nuevas condiciones de WhatsApp?
Las nuevas condiciones de WhatsApp: ¿Qué pasa si no aceptamos?
WhatsApp lo anuncia a través de una breve entrada en su centro de ayuda:
«Si no las aceptaste para ese entonces, WhatsApp no eliminará tu cuenta. No obstante, no tendrás acceso a todas las funciones de WhatsApp hasta que las aceptes. Durante un breve período, podrás recibir llamadas y notificaciones, pero no podrás leer ni enviar mensajes desde la aplicación.»
En otras palabras, el rechazo a los nuevos términos de uso coloca a WhatsApp en una especie de «modo zombie» con funciones limitadas. La imposibilidad de leer y/o enviar mensajes esencialmente anula su función de mensajero, pero eso no es todo. La publicación oficial confirmá que también se aplicará la política de usuarios inactivos:
«En general, se eliminan las cuentas de WhatsApp que estén inactivas por más de 120 días a fin de mantener la seguridad, limitar la retención de datos y proteger la privacidad de los usuarios. Se considera que hay inactividad cuando el usuario no se conecta a WhatsApp.»
Es importante destacar la frase «cuando el usuario no se conecta a WhatsApp». Esto sugiere que el modo zombie sería considerado como «actividad» (ya que será posible recibir llamadas y notificaciones) siempre y cuando abramos la app dentro de los 120 días.
En resumen: Más cambian las cosas, más siguen igual
La buena noticia es que nadie perderá su cuenta si no acepta los nuevos términos antes del 15 de mayo. La mala es que nadie aprendió nada. Más allá de los millones de usuarios que abandonaron al mensajero, las protestas en la Web y los reclamos por parte de expertos en privacidad, tenemos una idea bastante sólida de lo que va a suceder: La gran mayoría de los usuarios priorizará la conveniencia, la utilidad y la gratuidad de WhatsApp sobre su recolección de datos, y aceptará los términos. En lo personal, preferiría que WhatsApp regrese a su viejo modelo, pagando uno o dos dólares por año. Hoy, eso suena a ciencia ficción…