Hemos visto toda clase de dispositivos vestibles, incluyendo brazaletes y relojes inteligentes, pero también nos cruzamos con algunos conceptos basados en vestimenta. La idea de «entrelazar» ropa y electrónica no es nueva, sin embargo, el reciente Project Jacquard de Google quiere llevar la fusión de ambas mucho más allá, utilizando hilos conductivos para crear telas táctiles e interactivas que pueden ser fabricadas con maquinaria tradicional.
Tu smartphone comienza a sonar en un momento inapropiado. En vez de sacarlo de tu bolsillo e interrumpir la llamada, haces un pequeño gesto sobre la manga de tu camisa. ¿Quieres controlar el volumen de la música? Un gesto en la otra manga es todo lo que necesitas. ¿La persona que llama es demasiado insistente y decides atender? Un leve toque en el pecho al estilo Star Trek desvía la llamada a tu accesorio Bluetooth… ¿Ciencia ficción? Tal vez por ahora, pero los ejemplos que acabo de dar se encuentran definitivamente entre los planes a futuro de muchos fabricantes. Hay algo que todavía no convence por completo al usuario sobre los dispositivos vestibles, y es probable que la clave se encuentre en hacerlos desaparecer por completo, desarrollando una integración con la ropa mucho más avanzada. De más está decirlo, semejante visión requiere que las fuerzas de la tecnología y la moda formen una nueva alianza.
Así es como descubrimos a Project Jacquard, un nuevo experimento a cargo de la división ATAP de Google, la misma que desarrolla al teléfono modular Ara. Su objetivo es añadir soporte táctil y reconocimiento de gestos sobre tela, aplicando componentes compatibles con telares industriales. La magia se encuentra en los llamados hilos conductivos, que combinan aleaciones metálicas y materiales como algodón, poliéster o seda. Estos hilos tienen la flexibilidad y la resistencia suficiente como para ser colocados en un telar convencional y permitir a los diseñadores obtener lo mejor de ambos mundos. Miniaturizar el resto de los componentes electrónicos es un paso fundamental, pero en el vídeo podemos apreciar atajos muy interesantes, como esconder los circuitos en botones y otros adornos.
La mejor parte de Project Jacquard es que los materiales pueden ser producidos en masa, lo que debería garantizar un relativo bajo costo. En esencia, desarrolladores de software y diseñadores de moda tendrán la posibilidad de unir fuerzas para crear la próxima generación de dispositivos vestibles, en la forma de camisas, sacos, y camisetas casuales. Las demos en el piso de la conferencia I/O estuvieron enfocadas sobre touchpads capaces de registrar diferentes niveles de presión, y controlar bombillas inteligentes. ¿Buscará Google ingresar al universo de la alta costura con Jacquard de su lado?