A la hora de editar o crear una imagen, lo único disponible en una instalación de Windows promedio es el Paint, una herramienta clásica que proporciona funciones muy básicas, y que es rápidamente abandonada en favor de otras utilidades. Sin embargo, Project Gustav busca alcanzar un objetivo muy especial: Ofrecer a los usuarios una aplicación para dibujo que sea moderna y clásica a la vez. Moderna porque aprovecha lo último de la tecnología como los GPU y las pantallas táctiles, y clásica, porque el método de trabajo se asemeja mucho a estar delante de un lienzo con pinturas verdaderas.
Si bien resulta una fuente de entretenimiento entre los más pequeños, el Paint de Windows es completamente inadecuado para realizar incluso las tareas más sencillas de edición de imágenes. Existen muchas alternativas gratuitas y de código abierto en la Red, pero lo cierto es que cualquiera que busque realizar un trabajo profesional suele apuntar a herramientas propietarias como Adobe Photoshop, y olvidarse de dibujar con el ratón. Periféricos como las tablas Wacom están a la orden del día, y gracias a ellas es posible apreciar algunos de los excelentes trabajos que realizan ciertos diseñadores. Microsoft carece actualmente de una opción viable para profesionales y entusiastas del dibujo, pero eso podría cambiar con la presentación del prototipo Gustav.
El Proyecto Gustav es un sistema de pintura digital que permite a los artistas lograr un nivel de imnersión mucho más profundo, utilizando a su favor diferentes tipos de tecnología que ofrecen una experiencia más realista. En la lista encontramos al procesamiento por GPU, y las pantallas con capacidad multitouch, pero al mismo tiempo Gustav es compatible con interfaces Wacom existentes. El resultado es extremadamente similar al que se puede lograr pintando sobre un lienzo verdadero. Hasta hace poco, el poder de procesamiento necesario para simular de forma realista las técnicas clásicas de pintura no estaba disponible, pero el notable avance en el hardware ha abierto una puerta lo suficientemente grande como para que Gustav sea una realidad. ¿Qué tan "realista" es? Bastante, ya que algo tan sencillo como crear un color especial se debe hacer tal y como en la vida real: Mezclando colores.
Básicamente, Gustav podría presentarse como una opción viable para aquellos que no tienen ni el tiempo ni las ganas de entrenarse en el uso de aplicaciones como Adobe Photoshop, pero que a la hora de tomar un lápiz y un trozo de papel, pueden crear cosas extraordinarias. Todavía no se sabe si Gustav encontrará su camino a una aplicación comercial, pero hasta aquí parece un prototipo muy bien logrado. Ahora, si Gustav es la herramienta adecuada para hacer que Microsoft ingrese de forma más seria en el mercado de los editores de imágenes, eso no lo sabemos. Photoshop es la herramienta de facto entre los editores de imágenes, y tal vez sea necesario algo más complejo por parte de Redmond para hacer un poco más de sombra.