A pesar de las garantías que presenta el estándar TrueType, el usuario no sabe cómo se verá una fuente sobre papel hasta que lleve a cabo una impresión. Cualquier procesador de texto puede ayudar en esto, pero la aplicación Print My Fonts presenta una interfaz mucho más cómoda para visualizar, seleccionar, e imprimir las fuentes deseadas, usando frases que nos ayuden a verificar su apariencia real, y su compatibilidad.
Me ha pasado tantas veces que ya no puedo enumerarlas. Confiado en haber escogido una fuente bella y elegante, el arrepentimiento es total una vez que la veo sobre el papel. Hay ocasiones en las que la impresora necesita ser limpiada y/o calibrada… y hay otras en las que la fuente es simplemente horrible, sin importar cómo se vea en la pantalla. Por supuesto, la sección «Fuentes» en el Panel de Control no se ha ido a ninguna parte, pero la idea de Windows es que el usuario haga doble clic sobre cada una de ellas para ver las muestras, o se conforme con visualizar apenas tres letras. De más está decirlo, necesitamos una solución un poco más robusta.
¿Cómo se ven tus fuentes sobre papel?
Ahí es cuando aparece Print My Fonts, un pequeño programa cuya función es la de asistir en la visualización de fuentes, comprobar la compatibilidad con caracteres avanzados (por ejemplo, algunas fuentes no tienen la ñ), e imprimir múltiples fuentes a la vez. También es un excelente recurso para detectar la cantidad de fuentes instaladas en el sistema. En mi caso, hay 278 fuentes… de las cuales sobran 250 o 260, siendo honesto. Si no hay una impresora disponible, Print My Fonts ofrece como alternativa exportar los resultados a documentos RTF o HTML, e imágenes BMP-JPG-PNG.
Print My Fonts es gratuito, portátil, no posee ninguna instalación formal ni obsequios extraños de fondo. Entre sus opciones avanzadas encontramos parámetros de exportación como tamaño y color de fuentes, el espacio entre líneas, el color de segundo plano, y número máximo de fuentes por imagen (en caso de que sean demasiadas). Para finalizar, su interfaz soporta varios idiomas, incluyendo al español.