Lisandro Pardo
Los diseños modernos y estilizados de los dispositivos móviles han tenido su impacto sobre la cantidad de botones físicos disponibles para controlarlos. Aunque las funciones siguen estando allí, hay veces en las que llegar a ellas puede resultar muy incómodo. El proyecto Pressy ofrece un atajo definitivo al instalar un botón en el conector de entrada para los auriculares, y programarlo con casi cualquier acción disponible en un dispositivo Android.
Caso personal: La pantalla de bloqueo de Android ofrece una vía más o menos rápida para acceder a la aplicación de la cámara sin tener que desbloquear a todo el dispositivo. Sin embargo, he descubierto que en muchas ocasiones ni siquiera eso es suficiente. Cuando supuestamente estoy “listo”, la foto ya se perdió, y estoy convencido de que eso le pasa a mucha gente. Los dispositivos móviles han absorbido varias funciones, reemplazando en el proceso a otros gadgets dedicados… pero eso no quiere decir que el reemplazo haya sido completamente efectivo. Hay veces en las que simplemente quieres sacar el smartphone de tu bolsillo, presionar un botón y tomar una foto. Samsung trató de cubrir ese hueco con su Samsung Galaxy Camera, que no tiene nada para envidiarle a un smartphone… salvo por la telefonía.
La gente detrás del proyecto Pressy nos enseña una alternativa tan simple que cuesta creerlo: Convertir al conector de los auriculares en un botón. ¿Qué hace ese botón? Bueno, lo que tú quieras. Tomar una foto, grabar una conversación o un vídeo, terminar una llamada, encender la linterna… cuando el Pressy y su aplicación están instalados, el botón se convierte en un control físico dedicado para esa acción que repites una y otra vez en el smartphone. Y cuando deseas utilizar auriculares, la aplicación transforma al botón del micrófono (asumiendo que los auriculares sean también “manos libres”) en un Pressy. Como si fuera poco, la aplicación de Pressy es compatible con secuencias especiales (por ejemplo, dos pulsaciones cortas, o dos largas) para expandir su funcionalidad.
La campaña de Pressy en Kickstarter comenzó el sábado pasado. Sus desarrolladores necesitaban de solamente 40 mil dólares para ingresar a la fase de producción, y ya han recaudado 350 mil, por lo tanto, estamos ante otro potencial gigante del crowdfunding. ¿Cuánto cuesta un Pressy? En estos momentos, 17 dólares, más otros cinco en concepto de envío internacional. Es una pena que haya que esperar hasta marzo de 2014 para verlo en circulación, pero no quedan dudas: La gente lo quiere.
