Es básicamente un meme a esta altura: Tratamos de copiar archivos en Windows, y el tiempo estimado oscila entre 19 segundos y 73 horas. Este comportamiento errático no es algo nuevo que digamos, y se remonta a la época del mismísimo Windows 95. Entonces, ¿por qué Windows calcula tan mal el tiempo estimado para sus operaciones con archivos? La respuesta llega a través de Dave Plummer, ingeniero retirado de Microsoft a quien recordamos por el port del Cadete Espacial, el Administrador de Tareas, y por supuesto, el diálogo de progreso…
Dave Plummer debe ser una de las pocas personas con un cómic dedicado en XKCD, al que puedes leer aquí. Pero en vez de ofenderse o enojarse, decidió aprovechar la oportunidad para explicar por qué Windows hace un trabajo tan pobre al calcular el tiempo estimado mientras copia archivos, ya que fue uno de los ingenieros que trabajó en ese elemento.
El verdadero problema es que la interfaz de Windows (o Windows Shell si quieres llamarla así) trata de hacer una predicción sobre el futuro basándose en lo que ya ha sucedido hasta ese punto. Por este motivo es que cuando iniciamos un proceso de copia, notamos un tiempo estimado ridículo que se corrige automáticamente a los pocos segundos, y nunca para de cambiar.
«Tiempo estimado», o por qué la bola de cristal no funciona
Dave utiliza como ejemplo un hipotético viaje a New York: El viaje comienza con una caminata hasta el taxi, con una velocidad de 3.2 kilómetros por hora, por lo que el viaje tomará unos tres meses. Sin embargo, una vez que el pasajero está en el avión volando a casi 1.000 kilómetros por hora, el tiempo estimado baja a tres horas, y al tomar como referencia a esa velocidad previa, la interfaz sugiere que el pasajero demorará apenas 30 o 40 segundos en llegar a su destino una vez que salga del aeropuerto.
En este punto, Dave cita el caso de Google Maps, que realiza buenas predicciones aún con cambios en el tráfico y el clima. La diferencia es que Google Maps puede aprovechar una enorme cantidad de datos históricos, mientras que para el ordenador son irrelevantes. Otro ejemplo: Por más que mil usuarios descarguen los mismos 72.2 GB de Horizon Zero Dawn en Steam, las condiciones de todos ellos varían en hardware, software, velocidad de conexión, congestión de red y otros parámetros, generando mil resultados diferentes.
En otras palabras, Windows Shell sólo puede asumir que el futuro será como el pasado, y todas sus predicciones se desarrollan a partir de ese detalle, pero si hemos aprendido algo sobre los ordenadores y el propio Windows, es que sus condiciones de fondo se modifican constantemente. Desde el rendimiento de la red hasta los efectos del multitasking, pasando por el caché lleno del SSD, el antivirus chequeando archivos sospechosos y otras actividades en segundo plano, la interfaz de Windows tiene todo en contra. Y lamentablemente, a las barras de progreso no les va mucho mejor…