Hoy es el debut mundial de la Nintendo Switch. La Web se va llenando lentamente de reviews sobre la consola y su título principal, The Legend of Zelda: Breath of the Wild. Al mismo tiempo, debemos mencionar la interacción de los jugadores con los nuevos cartuchos de la Switch, que en esencia son tarjetas de memoria. Este detalle hizo que algunos bloggers y periodistas se coloquen un cartucho en la boca, sólo para descubrir por las malas que tienen un gusto absolutamente espantoso. La razón es sencilla: Nintendo lo hizo a propósito.
No quiero entrar mucho en el terreno de los reviews sobre la Nintendo Switch porque la consola técnicamente llega a las estanterías hoy (aunque muchos usuarios recibieron sus unidades con varios días de anticipación), y Nintendo aún debe corregir ciertos detalles de conectividad, pero lo que sí puedo decir es que el balance se perfila como muy positivo (por ahora), y que Breath of the Wild ha recibido puntuaciones asombrosas. Tampoco encontré reportes que indiquen algún problema con el regreso formal de Nintendo al cartucho en su nuevo sistema, al menos… en lo que se refiere a su funcionamiento. Los cartuchos son pequeños, casi como una tarjeta SD, y al parecer alguien tuvo la idea de colocarse uno en la boca. Jeff Gertsmann de GiantBomb habría sido el primero, y después de su tweet describiendo la situación, rápidamente lo siguieron otros.
El veredicto es unánime: Los cartuchos de Nintendo Switch tienen un gusto horripilante. Esto no se limita a Breath of the Wild, sino que se extiende a todos los juegos disponibles en la consola con ese formato. ¿Por qué? ¿De qué están hechos los cartuchos para dejar a personas adultas hundidas en la cobardía? Las preguntas no tardaron en llegar a Nintendo, y uno de sus portavoces confirmó que se trata de un mecanismo de protección para impedir que los niños pequeños (y potencialmente animales) dañen a los cartuchos con sus dientes, o peor aún, se los traguen. Los cartuchos cuentan con una cobertura especial de benzoato de denatonio, un «agente de aversión», y el químico más amargo conocido.
En resumen, una buena decisión por parte de Nintendo, incluyendo la propia elección del denatonio, ya que no es tóxico. Siempre es preferible el disgusto de un niño llorando por un gusto feo, que ver al mismo niño en la sala de emergencias esperando para que le saquen un cartucho de Zelda del estómago…
