Gracias al ingenio que con el que los inventores utilizando materiales cada vez más baratos, los robots de todas las índoles empiezan a poblar la tierra de a miles, y más allá de estar de que muchos están dotados con capacidades que nos asustan un poco, también hay otros muy amigables. Este es el caso de Polyro, un robot de código abierto creado por Tim Payne, de bajo costo y que tiene mucho futuro por delante como asistente en la investigación y en diversas actividades de ayuda.
El código abierto es una tentación que cada vez más industrias, laboratorios y establecimientos educativos están tomando como piedra angular de sus experimentos, y sus beneficios no sólo están presentes en la informática de baja y alta escala, sino también en la robótica. Un caso de los más interesante y también muy reciente es el de Polyro, un robot de código abierto, una invención de Tim Payne. Este ingeniero en robótica que se ha convertido en un Gepeto electrónico de varios modelos de robots y humanoides, pensó en las necesidades de modificar ciertos modelos de construcción para crear un asistente tecnológico que pudiera ser no sólo más amigable con el usuario, sino con su bolsillo y con su forma de entender la informática. Con estas reivindicaciones por delante ha construido un robot de código abierto y con materiales de bajo costo y basándose en modelos humanoides y en las necesidades reales de los entornos de investigación.
Resultado de la puesta sobre la mesa de estas cuestiones, Polyro ha visto la luz como un robot de código abierto que usa un total de 11 servomotores de modelismo Robotis Dynamixel y una netbook que corre Linux. En cuanto a las especificaciones físicas de nuestro robot de código abierto se destaca su altura de 99 cm y su peso de 8 kgs, dimensiones que hacen del transporte una cuestión por la que no preocuparse. A nivel articulaciones de sus miembros, el desarrollador nos relata que Polyro posee dos brazos con tres niveles de movilidad por pieza completa. Es otras palabras, tiene hombros, codos y muñecas, por lo que se adivinan muchas utilizaciones posibles en cuanto a manipulación no fina de objetos por el momento. Completando su estructura vemos que posee una cabeza con movimiento lineal y ojos estereoscópicos dotados de 2 web cams que pueden “parpadear” y recordarnos con nostalgia a Jhonny 5 o al más contemporáneo Wall-E por menos de $2000 dólares de construcción.
Un desarrollo futuro de Polyro, cuyo nombre proviene de (oPen sOurce friendLY RObot) promete, primeramente un sitio web oficial desde donde recibir y compartir ideas, y en segunda instancia la implementación de nuevos grados de movilidad para cada uno de sus miembros y partes corporales, así como un motor de voz dotado de micrófonos y altavoces, a lo que también sumaría un sistema de reconocimiento facial que serviría como fuente de innumerables usos posibles. Uno de ellos puede ser, como menciona el autor, la guía de estudiantes y visitantes en universidades o museos.