Algunas imágenes nos quitan el aliento. El fotógrafo coloca todo su conocimiento y su instinto en ese disparo, capturando un «fragmento de vida» que podría llegar a los ojos de millones, cortesía de las redes sociales y la Web en general. Ahora, si una imagen fija puede hacer eso, ¿cuál sería su efecto con un poco de movimiento? No hablo de vídeos en bucle, sino algo más sutil, como un GIF animado. Eso es exactamente lo que ofrece Plotagraph PRO: Transformar imágenes estáticas en GIF animados.
El formato GIF está a punto de cumplir treinta años, pero no existe ningún indicio que nos haga imaginar su desaparición. El mundo de la informática ha tratado de reemplazarlo varias veces, y aunque existen variantes como el .gifv o la reproducción mp4 en navegadores, el GIF resiste, lo cual es especialmente cierto con su versión animada. La forma más sencilla de crear un GIF animado es tomar una porción de un vídeo, reducir su resolución y la cantidad de cuadros (para no terminar con un GIF animado imposible de distribuir), y experimentar un poco hasta obtener el resultado deseado. ¿Pero y si todo lo que tenemos es una imagen? Sí, una foto en formato JPG o PNG. La respuesta llega a través de una nueva herramienta, conocida como Plotagraph PRO.
Desde un punto de vista técnico, Plotagraph PRO se presenta como una alternativa a la técnica de Cinemagraph. La diferencia, de acuerdo a la página oficial de Plotagraph PRO, es que el Cinemagraph es mucho más costoso y demanda más tiempo, además de estar basado en un vídeo. Al utilizar docenas de puntos de animación y diferentes máscaras sobre una sola imagen, Plotagraph PRO logra producir resultados muy similares a los de un Cinemagraph, sin olvidar la posibilidad de exportar el trabajo final a GIF animados con diferentes velocidades. El vídeo nos muestra a Trey Ratcliff explorando las funciones principales de Plotagraph PRO. Me hubiera encantado colocar el tutorial oficial, pero no permite embedding.
El detalle más importante que debemos dejar en claro sobre Plotagraph PRO es que no apunta al consumo general, sino que se perfila como una aplicación destinada a profesionales. Al trabajar en la nube y adoptar un sistema de suscripción bastante costoso, lo más probable es que el usuario promedio se mantenga alejado. ¿Qué tan «costoso»? De acuerdo a la información disponible, su «oferta de pre-lanzamiento» es de 299 dólares por 12 meses de suscripción y 10 GB de almacenamiento. Sí, a pesar de sus impresionantes resultados, digamos que el número «no está allí».
