Primero dijeron que la película estaba cancelada, y que no se adoptaría ninguna clase de distribución alternativa. Pocos días después, apareció tanto en la Web como en las salas. Y ahora, un reconocido disidente quiere hacer llover 100 mil copias en DVD y pendrives USB sobre territorio norcoreano. The Interview pasó de comedia a arma política, y el único objetivo es irritar a los líderes de Corea del Norte.
En la última mitad de la década de los ‘90, el padre de Park Sang-hak se encontraba realizando tareas de inteligencia en Hong Kong, donde asumió el papel de un hombre de negocios. En ese entonces, el gobierno de Corea del Norte realizó una “purga de líderes” dentro la agencia, por lo que llegó a la conclusión de que terminaría muerto si regresaba. La orden fue clara: Park Sang-hak y el resto de su familia debían escapar a China. Park dejó atrás a su prometida (a la que nunca volvió a ver), y uno de sus tíos fue ejecutado a golpes como “castigo”. La transición fue difícil, pero al final quedó todo claro para Park Sang-hak: De un lado había libertad de expresión y riqueza. Del otro, lavado de cerebros y hambruna. El régimen trató de asesinarlo en 2011, y en 2013 se convirtió en el presidente de la organización “Luchadores por una Corea del Norte Libre”, que realiza lanzamientos periódicos de globos cargados con literatura pro-democracia, DVDs, pendrives USB con copias de Wikipedia, y hasta dinero en efectivo para que la gente compre alimentos en el mercado negro. Ahora, es el turno de The Interview.
La controvertida comedia de Sony Pictures que explora las aventuras de dos periodistas con la orden de asesinar a Kim Jong-un ha estado en boca de todos durante las últimas semanas. Después de muchas idas, vueltas, y ataques adicionales, el filme se estrenó en cine y en la Web. Incluso fue muy buscado (y descargado) en las redes de intercambio, por lo tanto, no hay dudas de que The Interview ha llegado lejos. Aún así, no llegó a Corea del Norte. Park Sang-hak y la Fundación de Derechos Humanos serán parte de una campaña llamada “Hack Them Back”, que comenzó el pasado 19 de diciembre. El objetivo es distribuir cien mil copias de The Interview en DVD y pendrives con subtítulos en coreano durante todo el año.
¿Cuántas de esas copias llegarán realmente al Norte? Nadie lo sabe con seguridad. La Fundación de Derechos Humanos confirmó que el gobierno norcoreano ha creado un “grupo de tareas” para impedir a toda costa que The Interview ingrese al país. Al mismo tiempo, la situación en Corea del Norte nos hace pensar que el lanzamiento de estas copias será poco más que simbólico. Creo que las prioridades para cualquier norcoreano están más enfocadas en obtener alimentos que en ver una película con el potencial de eliminarlo a él y a su familia.