El gigante de Cupertino siempre ha considerado al tamaño como uno de los parámetros principales para sus productos, más allá de las diferencias de pensamiento entre Steve Jobs y Tim Cook. Los dispositivos móviles disponibles que están basados en iOS utilizan pantallas que van desde las 3,5 a las 9,7 pulgadas, pero en los últimos meses Apple habría solicitado a sus proveedores pantallas con un tamaño mayor a cuatro pulgadas para smartphones (lo que nos hace pensar en una especie de phablet iPhone), mientras que en tablets rozan las trece pulgadas.
Este es el control de rumores, aquí están los hechos: Cada vez que surge el debate del tamaño de pantalla en los dispositivos móviles, recuerdo el comentario de Steve Jobs sobre las pantallas de siete pulgadas y el papel de lija. Jobs falleció en octubre de 2011, y poco más de un año después, Apple anunció al iPad Mini, con un tamaño de pantalla de 7,9 pulgadas. No quedan dudas de que la palabra de Jobs tenía un peso gigantesco, pero ni siquiera Apple puede escapar a las demandas del mercado. Ahora, un nuevo punto de presión se manifiesta entre los smartphones con una pantalla mayor a cuatro pulgadas. Apple no tiene ningún smartphone en mercado por arriba de esa marca, mientras que Samsung ya ofrece varios ejemplares bajo su familia Galaxy con pantalla de 4,5 pulgadas o superior.
De acuerdo a un reporte del Wall Street Journal proveniente de Taipei, los proveedores de Apple en la región habrían enviado componentes que son consistentes con el desarrollo de un phablet iPhone y un iPad con un mayor tamaño de pantalla. De momento, estos nuevos componentes estarían destinados a experimentos de diseño, y tampoco se han reportado las dimensiones exactas de pantalla, aunque en el caso del iPad, estaría cerca de las trece pulgadas. Todos los indicios apuntan a que Apple prepara una actualización de su línea de productos entre agosto y septiembre. Se espera que el famoso iPhone de bajo costo haga acto de presencia, mientras que el nuevo iPad conservará sus dimensiones actuales, aunque buscará ser más delgado.
Un aspecto que no ha sido tan explorado de las phablets es que a través de diseños más grandes, los fabricantes tienen la posibilidad de instalar baterías con mayor capacidad, un punto que lamentablemente sigue causando disgustos entre los usuarios. Sin embargo, el beneficio es limitado, ya que una pantalla de mayor tamaño también representa un incremento en el consumo. Si bien existen las denominadas “baterías extendidas” para productos Apple y Samsung, la estética no ha perdido su posición como factor crítico entre las últimas generaciones de dispositivos móviles. Un punto en contra de la teoría de un nuevo phablet iPhone está en la actual oferta de productos. Si llegara a lanzarlo, Cupertino se encontraría con tres modelos de tres tamaños diferentes, quebrando la continuidad que ha logrado mantener entre sus productos durante todos estos años. Por suerte, no habrá que esperar mucho para averiguar cómo sigue esto.
