Lisandro Pardo
El usuario está obligado a atravesar la clásica “temporada de caza” en materia de actualizaciones. Cada programa que abre en el ordenador advierte sobre la existencia de una nueva versión, y si consideramos la tarea de descargar los instaladores manualmente, estamos ante algo que va más allá de lo tedioso. Patch My PC tiene como objetivo simplificar todo el proceso, reportando versiones antiguas y realizando las descargas necesarias.
Concedido: Todos hemos dejado alguna vez una actualización para más adelante. Si el programa no tiene un rol crítico ni afecta directamente la seguridad del sistema, siempre puede esperar un par de días más, y otro par de días más… hasta que nos damos cuenta de que la instalación se encuentra dos o tres versiones por detrás del último build oficial.
Como suele suceder en estos casos, el efecto es acumulativo, y no es del todo agradable descubrir que hay una docena de programas en la misma situación. El procedimiento convencional es visitar la página del desarrollador, descargar el instalador adecuado, y dejar el software al día… asumiendo que la última versión no sea peor que la anterior. El fantasma del downgrade flota alrededor de todos los ordenadores, y para evitar momentos amargos, es conveniente informarse antes.
Actualizar todos tus programas con un clic
Así es como llegamos a Patch My PC. El programa es una especie de “Windows Update” para la mayoría del software instalado en el ordenador. Los nombres que aparecen en verde indican que la última versión ya está presente en el sistema, mientras que las entradas en rojo advierten sobre una nueva versión. Patch My PC ofrece la opción de descargar los instaladores y proceder con cada update automáticamente. Además, ofrece un desinstalador bastante competente, similar al de CCleaner, y la cantidad de opciones de configuración resultan más que suficientes.
Si bien la compatibilidad con todos y cada uno de los instaladores no está garantizada (lo que demandaría una descarga manual), la mayoría de ellos se han comportado como corresponde durante nuestra prueba. Patch My PC también ofrece descargar hotfixes que hayan quedado rezagados en Windows Update, pero esa es una tarea que prefiero dejar a cargo de Microsoft.
Patch My PC es un ejecutable portátil de apenas 1,71MB que puede ser colocado en cualquier pendrive de mantenimiento sin inconvenientes. Lo cierto es que lleva algunos años entre nosotros, sin embargo, siempre ha mantenido una línea espartana en su interfaz, concentrándose más sobre el contenido que sobre la apariencia. La lista de programas soportados se va haciendo más grande con el paso del tiempo, por lo tanto, creo que vale la pena seguirlo.
