Lo hemos dicho con anterioridad: Las pantallas modernas pueden causar diferentes trastornos, comenzando con el insomnio. Pasamos muchas horas frente a ellas, y las pausas necesarias para descansar la vista son cada vez más frecuentes. Algunos programas tratan de corregir la situación modificando los niveles de luz automáticamente, pero la gente de Dasung propone un cambio radical: Paperlike, el primer monitor de tinta electrónica.
¿Cuántas horas pasas frente a una pantalla? Claramente se trata de una pregunta capciosa, porque el término «pantalla» dejó de estar limitado a ordenadores hace muchos años. Smartphones, tablets, relojes inteligentes y hasta el televisor (sea «smart» o no) suman tiempo y esfuerzo a nuestros ojos. El discurso es siempre el mismo: Con un poco de cuidado, una buena distancia y las pausas suficientes para descansar, los ojos serán capaces de recuperarse, sin embargo, estas sugerencias genéricas no se aplican a todo el mundo. Hay gente que la pasa realmente mal frente a un monitor, pero no pueden hacer nada al respecto… a menos que una vieja tecnología venga al rescate.
Proveniente de China, el monitor Paperlike de Dasung busca un lugar en nuestros escritorios como la primera solución basada en tinta electrónica, capaz de acompañar a monitores tradicionales, ya sea extendiendo su contenido o funcionando en modo espejo. Debido a que no necesita una fuente de alimentación, la única conexión del Paperlike es a través de un cable micro USB. Su tamaño físico es de 13.3 pulgadas, y de acuerdo al fabricante, la resolución asciende a 1.600 por 1.200 píxeles, o sea, un clásico formato 4:3. Su velocidad de actualización es lo suficientemente alta como para trabajar en procesadores de texto y planillas, y ofrece cuatro modos diferentes en lo que se refiere a visualización de imágenes. La compañía publicó un par de vídeos de demostración:
Paperlike es un producto inusual. Busca brindar una solución muy específica, a cambio de retirar a la siempre presente «backlight» y perder la posibilidad de ver colores. Su fabricante está buscando apoyo financiero en Indiegogo con el objetivo de llevarlo al mercado, y siendo honestos, ya superó su meta en un 400 por ciento. ¿Cuál es el problema? Sin más rodeos, el precio. Lo primero que uno piensa sobre la tinta electrónica es que se trata de una tecnología barata, pero Dasung quiere 800 dólares por cada monitor, y una vez fuera de campaña, el precio será de 995 dólares.